El confinamiento pone contra las cuerdas la supervivencia de empresas

El extenso confinamiento por el coronavirus que vivieron muchos sectores de la economía en 2020 y la reimplantación de los mismos el pasado jueves genera incertidumbre en comercios y sectores productivos, que están muy alertas ante la evolución de la pandemia y las medidas restrictivas que toma el Gobierno para achicar la circulación del virus.

De acuerdo con la última encuesta de la Asociación de Emprendedores de Argentina (ASEA), el 27 por ciento de los que se vieron impactados por la crisis tuvo que cerrar en forma definitiva. De esos, los emprendimientos relacionados a salud y bienestar, gastronomía, arte y entretenimiento, son los más afectados por la pandemia en la Argentina.

“Por la pandemia, en 2020 cerraron más de 23.000 pymes en la Provincia de Buenos Aires”

“Más de un cuarto de los emprendimientos afectados de manera negativa tuvo que cerrar de manera definitiva. Entre los motivos principales se encuentran las disposiciones gubernamentales (34 por ciento), la falta de clientes (34 por ciento), desafíos financieros (11 por ciento) y los relacionados con el pago del alquiler del local (9 por ciento)”, remarca el sondeo.

En términos de ayuda estatal, más del 80 por ciento de los emprendimientos afectados reportó que no recibió apoyo. La mayoría de esos emprendimientos (65 por ciento) sabía de las medidas disponibles, pero no aplicó porque no cumplía con los requisitos de selección (70 por ciento). Incluso, un porcentaje importante (16 por ciento) no aplicó porque no supo cómo hacerlo.

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Por otro lado, el estudio refleja que la falta de demanda o clientes (56 por ciento) es la principal preocupación de aquellos emprendimientos que siguen operando. En un segundo lugar aparece el flujo de caja (39 por ciento) y las posibles disposiciones gubernamentales, como las nuevas medidas relacionadas al aislamiento preventivo obligatorio o a la reducción de capacidad de los establecimientos comerciales (30 por ciento).

Asimismo, casi un tercio (28 por ciento) de los emprendimientos que siguen operando no sabe cuánto tiempo podrá sobrevivir de cara a una segunda cuarentena obligatoria.

El objetivo de la encuesta fue conocer el impacto del COVID-19 en los emprendimientos a un año de iniciada la pandemia en la Argentina. La respondieron 292 emprendedores, la mayoría de la Provincia de Buenos Aires (35 por ciento), la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (28 por ciento), Córdoba (9 por ciento), Santa Fe (8 por ciento) y Mendoza (3,4 por ciento).

EN LA REGIÓN

Para el presidente de la Confederación Económica de la Provincia de Buenos Aires, el platense Guillermo Siro, “desde las entidades gremiales empresarias vemos que uno de cada tres emprendedores que abrieron en la Provincia en los últimos dos años tuvieron que cerrar, no lograron superar la pandemia y la situación macroeconómica que ha generado. La provincia perdió más de 23.000 pymes en 2020 y 230 mil puestos de trabajo”.

El dirigente explicó los graves problemas que vive el sector y lo que considera se debe hacer para volver a empezar, superada la pandemia.

“No todos los emprendedores son artesanos, pero hay muchos que sí, y lo primero que se suspendió fue la venta en espacios públicos y afectó a la capacidad de venta, como también la falta de crédito. Y muchas de las herramientas que puso el Estado para ayudar hubo emprendedores que no accedieron por distintas razones, en especial porque no tenían cómo inscribirse. Por eso el desarrollo del emprendedurismo debe ser una prioridad para poner en marcha a la Provincia cuando pase la pandemia, con medidas y acciones específicas para empresas nuevas”, destacó Siro.

Para Francisco Gliemmo, presidente honorario de la Unión Industrial del Gran La Plata, “las pymes y en especial las micropymes sufren mucho por la incertidumbre. Los vaivenes de la economía, una inflación que es calamitosa, que limita cualquier posibilidad de futuro. La falta de medidas para atacar esto va a hacer que este 27 por ciento de cierres sea mucho más, porque hoy la situación con los nuevos cierres es más complicada. Nadie puede subsistir en un sistema en el que los emprendedores no tienen una reforma impositiva que respalde al trabajo. La presión tributaria para los que están en blanco es terrorífica y por eso hay una economía informal que supera el 50 por ciento, y entonces las condiciones para un trabajo normal son inviables”.

“El Gobierno tiene que plantear una mesa de diálogo para que los sectores de la producción puedan sostener las fuentes de trabajo, con cuestiones puntuales por el contexto aunque sea para subsistir y después pensar en el mañana. Cada día la situación es más complicada por eso las autoridades tienen que sentar en una mesa a los sectores del trabajo y consensuar 4 o 5 medidas que tiendan a la salida de esta situación tan compleja”, agregó Gliemmo.

“El Gobierno tiene que plantear una mesa de diálogo para los sectores de la producción”

Por su parte, Gustavo Celestre, presidente de la Federación Empresaria de La Plata (FELP), sostuvo que “en la agenda tendrá que aparecer cómo se asiste al sector, porque muchas empresas y comercios tienen problemas económicos casi terminales”.

El titular de la FELP explicó que “hay que priorizar la salud, porque sin salud no vamos a poder trabajar. La preocupación es terrible. Este problema es catastrófico. Lo que pasa que el sostenimiento de las pymes abiertas es necesario. No nos olvidemos que en el país hay 100 mil pymes cerradas, que tienen 2 o 3 empleados atrás. Tenemos mucha gente sin actividad”.

Celestre además manifestó que “somos conscientes que si tenemos que cerrar una hora antes lo haremos. Pero trataremos de mantener los comercios abiertos para seguir trabajando con todos los protocolos necesarios. Necesitamos la actividad permanente del comercio y de pymes activas”.