“Quiero quedarme en Estudiantes”

El próximo 5 de diciembre Abel Balbo dará inicio a su ciclo como entrenador principal de Estudiantes de La Plata. Y dentro de la primera práctica a cargo del exdelantero de la Selección Argentina habrá varios nombres que regresan al club de sus respectivos préstamos y que intentarán ganarse un lugar en el Pincha versión 2023.

Entre ellos estará Bautista Kociubinski, de último paso por Aldosivi de Mar del Plata y a quien ya le avisaron que deberá presentarse en el Country de City Bell. En realidad no a él, pero sí a su entorno. “Se han comunicado con mi representante para decirle que tengo que presentarme el 5 de diciembre. Nada más”, explicó el mediocampista en diálogo con este matutino.

Actualmente recuperándose de una pubalgia que lo tuvo al margen de los últimos partidos del Tiburón, el surgido en la cantera albirroja repasó sus meses en La Feliz, donde vivió de todo.

De aquel estreno con titularidad y gol ante Defensa y Justicia en Florencio Varela de la mano de Leandro Somoza a los malos resultados, el cambio de técnico, el apriete de la barra con la repudiable quema de autos y un descenso que tuvo que contemplar desde afuera. Todo en cuestión de meses para quien vuelve al Pincha con un objetivo muy claro: quedarse.

- ¿Cómo definís tu paso por Aldosivi?

- Fue una montaña rusa. Arranqué muy bien y me sentía muy bien. Cómodo, con muchas ganas de jugar y mostrarme, a lo que había ido. Y los primeros partidos me sentí muy bien. Tuve muy buenos partidos. Tuve el gol contra Defensa, que me ayudó muchísimo. Pero yo siento que un poco la situación que estaba viviendo el club resultó muy complicada. La verdad que es muy difícil el día a día dentro de un equipo que está peleando el descenso. Se siente mucho el tema de la presión. Cuando nos pasó lo de los autos, fue lo que más me costó sobrepasar. Se dio junto con varias cosas personales: estar lejos de mi familia y tener que vivir eso, la verdad que a mí me costó. Siento que influyó también un poco en mi juego y en mi forma de sentir. No estaba bien. Me sentía mal. Fue una locura. La situación fue jodida, muy difícil. Ya después de eso, yo quería mentalizarme para volver a jugar lo más rápido posible. Y por decisión del técnico, algunos partidos no los jugué. Ya en el último tiempo me agarró esta pubalgia que me tuvo afuera no sé cuantos partidos. Fue una experiencia de varias situaciones negativas, como el descenso, el tema de irme a otro club...todo nuevo para mí. Pero fueron todas experiencias que me sirvieron en lo personal para crecer, para madurar. Experiencias que me van a ayudar a lo largo de mi carrera. Así que las veo, por más que hayan sido experiencias duras o negativas, positivas porque me han ayudado a crecer.

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- Lo tuviste a Somoza allá, que jugaba de volante central. ¿Qué pudiste absorber de él?

- La verdad que por más que haya terminado todo como terminó, con Leandro se formó un buen vínculo. Él me ayudo muchísimo a mí en todo sentido, tanto en lo futbolístico como en lo personal. Pude encontrar un nivel mío que hacía mucho que no encontraba. Además tomé muchos conceptos de la posición: la intensidad, jugar a dos toques. Darle dinámica al juego y jugar siempre para adelante. La forma y la posición para presionar. Me ayudo muchísimo. Cuando estuve un poco mal, también me puso un poco el hombro. En los dos aspectos valoro mucho lo que me ayudó.

- En relación al jugador que se mostró acá en Estudiantes, ¿sos mejor, sos más completo o sos diferente después de lo que viviste en Mar del Plata?

- Creo que vuelvo un poco más experimentado. Todo esto me ayudó mucho a crecer. Siento que hoy estoy mejor y más experimentado. Me siento mejor plantado que antes.

- Son muchos los jugadores que deben volver a Estudiantes. ¿Por qué creés que se da esto de que tantos pibes firman y después les cuesta asentarse en el club? ¿Por qué es tan difícil?

- Por lo que se dice. Es verdad que es muy difícil mantenerse en Primera. Viene por ese lado. Y la mejor opción cuando no tenés lugar o cuando no estás cómodo y querés más rodaje, es salir a préstamo. En mi caso fue eso, un poco con ayuda del técnico de ese momento. Lo mejor para mí era salir a préstamo, mostrarme en otro lado y buscar en otro club lo que por ahí no estaba encontrando en Estudiantes.

- Sos uno de los nombres que se mencionan que entrarían en una evaluación por parte de Balbo. ¿Eso te motiva?

- Sí, me motiva muchísimo porque mi idea es estar en Estudiantes. Yo quiero prepararme, primero para poder competir. Estoy pensando nada más que en recuperarme de la lesión esta y llegar diez puntos a la pretemporada para poder competir y estar a disposición y al ciento por ciento. Me motiva mucho.

- El hecho de que venga un entrenador nuevo, ¿hace que a priori arranquen todos con las mismas chances?

- No sé. En lo único que pienso yo es en mí y en poder estar el 5 de diciembre al cien por ciento para poder competir. Pienso en eso: en poder estar bien y en poder competir para ganarme un lugar. Después, las decisiones del técnico o del club son decisiones y también se van a respetar. Yo por mi parte estoy enfocado en entrenarme y en ya terminar de recuperarme de esta lesión para estar diez puntos de cara a la pretemporada. Quiero poder competir y lograr mi objetivo que es quedarme en Estudiantes.

“Siempre estuve seguro de que quería jugar en Primera en Estudiantes”

Bautista Kociubinski,
y un deseo que lo acompaña desde muy chico

- Varios de los entrenadores que tuviste en tu formación en el club me hablaron de que ya mostrabas una cabeza distinta desde muy chico. Y que en todo momento tenías en claro que querías ser jugador de fútbol.

- Sí, es así. Tuve muy buenos vínculos con los entrenadores en Inferiores. Y con Pablo (Quatrocchi) también. Todos me ayudaron muchísimo. Me acuerdo que yo les decía siempre que quería ser jugador profesional. Se los manifestaba siempre y ellos me escuchaban y me aconsejaban. Estaba seguro de que quería jugar en Primera en Estudiantes.

Lo cierto es que todo parece indicar que a partir del próximo 5 de diciembre Bautista Kociubinski tendrá algo que en el mundo del fútbol no abunda: una segunda oportunidad.

Más maduro en lo personal y con otro rodaje en lo futbolístico, ya tiene marcado en su calendario el momento que buscará cumplir con su objetivo.