Terror por un asalto a los tiros en un local del Centro

Cuatro delincuentes armados ingresados anoche a la sucursal de Diagonal 80 de la casa de deportes Mateu y casi desatan una tragedia. Es que efectuaron un disparo dentro del comercio con un pistolón o arma tumbera y los perdigones, de rebote, impactaron en las piernas de al menos dos clientes. Un hombre de 65 años y una mujer de 64.

De inmediato, con la situación bajo total control, los ladrones dominaron la escena, paralizada por el miedo extremo, y se apoderaron de una cantidad de dinero en efectivo.

El reporte oficial no mencionó otros objetos de valor o la pérdida de mercadería, aunque no se descarta un botín aún mayor.

Lo cierto fue que, apenas los ladrones iniciaron la fuga, en moto, se activaron las alarmas y personal policial llegó al comercio para tomar nota de lo sucedido y auxiliar a los heridos.

Mientras tanto, con las cámaras de seguridad empezaron a seguir sus movimientos y alcanzaron a captar a un sospechoso, que circulaba a toda velocidad con dirección a la ciudad de Ensenada.

Precisamente, con varios móviles desplazándose a la zona, lograron cortar su huida en la avenida 122 entre 40 y 41.

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Una vez acorralado y sin salida, al asaltante no le quedó otra cosa que deponer su actitud y tirarse al suelo.

Allí los oficiales incautaron una bolsa con 16 mil pesos, que se presumen forma parte de lo robado.

El tema es que se pudieron llevar los cómplices, a quienes aún están buscando.

Las cámaras del local serán en ese sentido de vital trascendencia para su captura, como ha sucedido en otras ocasiones en ese mismo negocio.

El aprehendido tiene 21 años y domicilio en barrio Aeropuerto.

Le imputaron el delito de “robo calificado en poblado y en banda”, con intervención del fiscal Álvaro Garganta, que en la jornada de hoy seguramente le tomará declaración indagatoria, una vez que requiera su detención al juez de garantías Juan Pablo Masi, a la espera de que la medida sea convalidada.

En principio, de los lesionados se indicó que estaban en buen estado general de salud, más allá del dolor de las perdigonadas y el susto que se llevaron, que resultó infinito.

En la casa de deportes, además, se encontraban varios empleados y el personal de control de acceso y egreso, que no está armado y nada puede hacer en este tipo de incidentes graves.