Tomás Jofré: un viaje en el tiempo por la “joya de campo”

A 158 kilómetros de La Plata, se encuentra el pueblo de Jorge Born. Tomás Jofré es el nombre conocido por la vieja estación donde llegaba la Línea Sarmiento del tren. Se trata de una localidad de Mercedes, conocida como punto gastronómico de campo, a 2 horas y 30 minutos de viaje de la Ciudad. Para llegar, se debe tomar Autopista Ricardo Babín (La Plata-Buenos Aires), Au. 25 de Mayo, Au. Perito Moreno, Acceso Oeste, Ruta Nacional Nº7, hasta RN Nº5 (Au. Luján-Bragado) y Ruta Provincial Nº41 hasta el acceso al paraje.

Respecto a lo que destaca al pueblo, Santa Victoria es uno de los espacios mejor calificados por los visitantes y uno de los primeros que se ve cuando se ingresa a la localidad. Allí funciona el sistema de tenedor libre, que destaca a Tomás Jofré sobre el resto de los destinos de turismo rural de esa región. Además, la carta incluye una entrada con embutidos de campo y diferentes tostadas, un plato principal en el que se pueden elegir pastas o la parrillada y un postre.

También están otros tantos locales como Baja La Vaca Del Nogal, una parrilla con apetecibles platos y una fachada típica de pueblo; La Macanuda, reconocida por los abundantes platos; El Gateado, valorado por la calidad de los productos; Q´Tomas? se destaca por una gran ambientación; El Ranchito, donde remarcan la picada y el asado; Antenor, un típico retó de campo; Lo del Tata, con clásicos cortes de carne y achuras; Restaurante Silvano, renombrado por la cualidad de los fiambres; La Antigua Casona, de cálida atención y buena mercadería; La Florinda, con opciones al horno de barro; La Esquina, donde recomienda comer pollo o riñones al disco; Begoña Restaurante, que resalta por la entraña con mil hojas de papas o la bondiola con batatas fritas; Restaurante Fronteras, un sitio familiar; El Mangrullo, con menús exquisitos; y tantos otros.

Esta ruta invita a un viaje al pasado, donde es posible experimentar la vida de los primeros inmigrantes gringos y españoles. Caminando por sus calles de tierra, se pueden ver casas antiguas con pisos de ladrillo y jardines de malvones, que reflejan la cultura del campo. Su gastronomía local ofrece platos tradicionales como pastas caseras, asado, galletas de campo y el famoso Salame Quintero, siempre acompañados de la amabilidad de sus habitantes.

Dentro de las principales atracciones turísticas se encuentran la Plaza Central, la estación del ferrocarril y la Capilla Nuestra Señora de Luján. También suelen ser convocantes las ferias artesanales y los espectáculos folklóricos, a la vez que puede recorrerse la localidad en cabalgatas y paseos en sulky.

Reconectar con el aire puro caminando por las vías del tren, descubrir los tesoros antiguos que se esconden en cada manzana, caminar por el paseo de artesanos o comprar recuerdos en la Plaza Central y apreciar el paisaje de campo, son algunas de las actividades que se promueven.

El pueblo recibe su nombre de dos figuras: Tomás Jofré, un jurista destacado de San Luis, y Jorge Born, empresario belga fundador de Bunge y Born. Desde 1931, ambas denominaciones coexisten en este pequeño pueblo de 150 habitantes, primer polo gastronómico del país, cuya economía depende del turismo y actividades rurales.

La estación ferroviaria / Google Maps