VIDEO. “Cara a cara” inesperado y sin móvil de venganza
Edición Impresa | 1 de Marzo de 2025 | 02:19
Se sabía de la movilización convocada a las puertas de los tribunales penales de La Plata. También de la presencia de otras víctimas de la inseguridad. Lo que sorprendió es la aparición de los padres de Kim Gómez y, mucho más, que tuvieron un cara a cara con los acusados de matar a la chiquita.
Todo transcurrió en la mañana de ayer, en medio de una nutrida movilización en reclamo de justicia.
En uno de los despachos de la sede judicial, la fiscal Carmen Ibarra y la jueza María José Lescano esperaban a los adolescentes de 17 y 14 años. Al primero para pedirle la prisión preventiva y al segundo, una medida de seguridad.
En ese momento, Florencia y Marcos, los papás de la víctima, irrumpieron en la escena y comunicaron su intención de estar presentes en ambas audiencias. El pedido produjo cierta tensión y reuniones entre las partes.
El temor era evidente, aunque las fuentes consultadas por EL DIA indicaron que “no pasó nada malo. Todo transcurrió sin insultos, sin palabras fuera de lugar, sin intenciones de vengar nada”.
Sí el padre pidió la palabra y, cuando estuvo frente al menor de 17 años, mirándolo firme, “le dijo que se tenía que hacer responsable de sus actos y que debía cumplir con todo lo que determine la Justicia”, agregaron los mismos voceros.
El chico miró y se mantuvo sin pronunciar frase alguna.
Un conocedor del ámbito del Fuero Penal Juvenil se refirió a lo sucedido y reflexionó: “Los medios y las redes sociales maltrataron más a los acusados, que los propios padres de Kim”.
Para esto, su defensa oficial se allanó al pedido de preventiva de la fiscal Ibarra, que en un plazo de 180 días debe elevar las actuaciones a la instancia de debate oral.
Respecto del adolescente de 14 años, pidió declarar y, si bien se ubicó en el lugar de los hechos, plantó una coartada. Dijo que no había participado del ataque. Todo bajo la atenta mirada de Marcos, ya que Florencia debió apartarse para evitar planteos de nulidad, porque próximamente será convocada a prestar testimonio.
Por eso se programó una nueva audiencia para la semana entrante, tiempo en el cual deberán evacuar testimonios y, otros medios de prueba, antes de resolver sí le otorgan la medida de seguridad.
La idea de la fiscal Ibarra es que se lo mantenga a resguardo en un centro cerrado, al menos, hasta que cumpla la mayoría de edad. Y se funda en los antecedentes jurisprudenciales, que en situaciones similares avalaron la medida.
Entiende que es peligroso para sí y para terceros y que debe estar en un espacio adecuado para su reinserción social.
Al parecer, la madre del menor de 14 años estuvo en algún momento en contacto con el adolescente, no así el padre y otros familiares del de 17, que se mantienen firmes en su postura de que el joven se haga responsable de lo que hizo y pague lo que tenga que pagar (ver aparte).
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