Menor apuñaló a remisero para robarle en pleno viaje, en 1 y 36

EL REMISERO RECIBIÓ CINCO PUNTOS DE SUTURA POR LAS CUCHILLADAS QUE RECIBIÓ EN UNA AXILA

Todavía no eran las 8 de la mañana y, de a poco, terminaba sin sobresaltos otra madrugada de un lunes feriado.

Carlos Antonio Zavala (37) esperaba la llegada del próximo cliente en la remisería de El Dique para la que trabaja. No imaginaba que apenas un rato después estaría en la sala de guardia del hospital Rossi, con un médico suturándole los puntazos que acababa de abrirle un adolescente de 17 años.

Zavala se salvó. El agresor quedó demorado en un Centro de Recepción de Menores. Y la policía frustró el robo en una escena digna de una película de acción.

Retomando el origen de la secuencia, tuvo como escenario la remisería ubicada en 122 y 35, donde alrededor de las 7.30 de la mañana hizo su aparición un joven pidiendo un auto.

Instantes después se subía al Chevrolet Corsa de color gris conducido por Zavala. El menor se acomodó en el asiento del acompañante y le indicó al chofer como destino una dirección ubicada en las inmediaciones de La Favela.

Al filo del drama

Si el remisero sospechó algo, no lo puso de manifiesto, por lo menos hasta que el “pasajero” sacó a relucir una faca de 30 centímetros de hoja de acero y mango de metal enchapado en negro.

No tuvo que dar demasiadas explicaciones. Quería el dinero, el celular y todo lo de valor, pero la víctima ni siquiera tuvo oportunidad de resistirse. Según fuentes policiales, “el ladrón le propinó varios puntazos a la altura de la axila” que el remisero intentó eludir, sin éxito.

Quiso la suerte que en medio de tanta tensión, y cuando circulaba por 1 entre 35 y 36, Zavala vio a un patrullero de la comisaría Segunda, al que le hizo señas para llamar la atención de los policías. Eso fue, justamente, lo que pasó.

El móvil se colocó a la par del Corsa, posición desde la que los agentes lograron observar que el acompañante mantenía reducido al conductor con un arma blanca.

Interceptaron entonces al coche y uno de los policías se abalanzó sobre la puerta del acompañante, hasta que la abrió y sacó al agresor del vehículo. Le quitó la faca y le colocó las esposas.

El remisero, en tanto, fue trasladado al hospital Rossi, donde los médicos que lo asistieron le aplicaron cinco puntos de sutura y recibió el alta.

El menor, al que le secuestraron la faca y un tubo de metal, quedó a disposición del fiscal del joven Juan Benavídez, por “tentativa de robo calificado y lesiones”.