Kirchner sigue sin hablar con Scioli
| 22 de Agosto de 2003 | 00:00
El presidente Néstor Kirchner no dio una sola señal de concordia hacia su vicepresidente desde que, hace cuarenta y ocho horas, se hizo evidente el conflicto latente en las últimas semanas en la cúpula del Gobierno. Mientras tanto, Daniel Scioli señaló que "ya va a haber oportunidad de aclarar las cosas" y Eduardo Duhalde procuraría unirlos a los dos en un acto que tendrá lugar hoy en la histórica quinta "17 de Octubre" de San Vicente.
"Néstor (Kirchner) no da un paso atrás ni para tomar carrera, y menos en un caso como éste, en el que existen cosas de fondo que los separan", aseguró un allegado de la máxima confianza del jefe de Estado.
NUEVO FUNCIONARIO
Kirchner, en tanto, le tomó ayer juramento al nuevo secretario de Turismo y Deportes, Carlos Enrique Meyer, en reemplazo de Germán Pérez.
Meyer, quien se desempeñó durante 12 años como subsecretario de Turismo de Santa Cruz, prestó juramento en un acto que se realizó en el Salón Blanco de la Casa Rosada, y al que asistieron ministros y demás funcionarios, pero no Scioli y su gente.
Algunas fuentes con llegada al Presidente estiman que el próximo paso sería poner bajo la lupa la administración de las áreas que están o estuvieron a cargo de Scioli. En ese sentido, una calificada fuente reveló que Kirchner dio instrucciones a distintos colaboradores para que examinen el desempeño administrativo de Scioli en su paso por la secretaría de Turismo y Deporte.
A esto se le sumará otra investigación que se lleva adelante en el Congreso en torno al proceder del vicepresidente para la designación del actual Secretario Administrativo de la Cámara, Carlos Machiaroli, de acuerdo con la fuente contactada.
"Scioli podría tener que dar explicaciones por sus actos, más que cuestionar al gobierno", indicó la fuente que sigue de cerca la actividad del vicepresidente en el Congreso.
En el caso de la administración en la cartera de Turismo y Deporte, que Scioli comandó desde la efímera presidencia de Adolfo Rodríguez Saá hasta el final de la gestión de Eduardo Duhalde, el seguimiento estaría a cargo de la Procuración del Tesoro, según indicó uno de los informantes.
Dirigentes cercanos al titular de la Cámara alta, en tanto, relativizan estas advertencias y sostienen que "todo lo que se está echando a rodar por los medios es obra de operadores del Ejecutivo".
"Kirchner puede se que esté enojado, pero su estilo de demostrar que es el jefe no llega a ese extremo", consignan los adherentes a Scioli.
SCIOLI PIDIO TRANQUILIDAD
A todo esto, el vicepresidente afirmó que "ya va a haber oportunidad para aclarar las cosas" con el presidente Néstor Kirchner, luego de la crisis que se desencadenó por las diferencias sobre temas centrales del Gobierno, como derechos humanos y tarifas.
Scioli volvió a hacer un llamado a la "tranquilidad" y sostuvo que "la gente tiene que tener confianza" en el rumbo de la gestión nacional. "Todos estamos buscando lo mejor para la Argentina", dijo Scioli en un tono conciliador, después de los enfrentamientos generados en el seno del Ejecutivo.
También, ante la insistencia de los cronistas, el vicepresidente volvió a remarcar que iba a ir "a trabajar al Senado, como todos los días".
Cuando le preguntaron por qué Kirchner aún no lo había recibido ni se había comunicado telefónicamente con él desde que el martes pasado dispuso relevar a la cúpula de la Secretaría de Turismo y Deporte, donde había funcionarios cercanos a Scioli, el vicepresidente no quiso profundizar en el tema.
Tampoco quiso responder cuando le preguntaron si "sabía que Kirchner era así", y sólo se limitó a señalar: "No voy a calificar al Presidente".
"Néstor (Kirchner) no da un paso atrás ni para tomar carrera, y menos en un caso como éste, en el que existen cosas de fondo que los separan", aseguró un allegado de la máxima confianza del jefe de Estado.
NUEVO FUNCIONARIO
Kirchner, en tanto, le tomó ayer juramento al nuevo secretario de Turismo y Deportes, Carlos Enrique Meyer, en reemplazo de Germán Pérez.
Meyer, quien se desempeñó durante 12 años como subsecretario de Turismo de Santa Cruz, prestó juramento en un acto que se realizó en el Salón Blanco de la Casa Rosada, y al que asistieron ministros y demás funcionarios, pero no Scioli y su gente.
Algunas fuentes con llegada al Presidente estiman que el próximo paso sería poner bajo la lupa la administración de las áreas que están o estuvieron a cargo de Scioli. En ese sentido, una calificada fuente reveló que Kirchner dio instrucciones a distintos colaboradores para que examinen el desempeño administrativo de Scioli en su paso por la secretaría de Turismo y Deporte.
A esto se le sumará otra investigación que se lleva adelante en el Congreso en torno al proceder del vicepresidente para la designación del actual Secretario Administrativo de la Cámara, Carlos Machiaroli, de acuerdo con la fuente contactada.
"Scioli podría tener que dar explicaciones por sus actos, más que cuestionar al gobierno", indicó la fuente que sigue de cerca la actividad del vicepresidente en el Congreso.
En el caso de la administración en la cartera de Turismo y Deporte, que Scioli comandó desde la efímera presidencia de Adolfo Rodríguez Saá hasta el final de la gestión de Eduardo Duhalde, el seguimiento estaría a cargo de la Procuración del Tesoro, según indicó uno de los informantes.
Dirigentes cercanos al titular de la Cámara alta, en tanto, relativizan estas advertencias y sostienen que "todo lo que se está echando a rodar por los medios es obra de operadores del Ejecutivo".
"Kirchner puede se que esté enojado, pero su estilo de demostrar que es el jefe no llega a ese extremo", consignan los adherentes a Scioli.
SCIOLI PIDIO TRANQUILIDAD
A todo esto, el vicepresidente afirmó que "ya va a haber oportunidad para aclarar las cosas" con el presidente Néstor Kirchner, luego de la crisis que se desencadenó por las diferencias sobre temas centrales del Gobierno, como derechos humanos y tarifas.
Scioli volvió a hacer un llamado a la "tranquilidad" y sostuvo que "la gente tiene que tener confianza" en el rumbo de la gestión nacional. "Todos estamos buscando lo mejor para la Argentina", dijo Scioli en un tono conciliador, después de los enfrentamientos generados en el seno del Ejecutivo.
También, ante la insistencia de los cronistas, el vicepresidente volvió a remarcar que iba a ir "a trabajar al Senado, como todos los días".
Cuando le preguntaron por qué Kirchner aún no lo había recibido ni se había comunicado telefónicamente con él desde que el martes pasado dispuso relevar a la cúpula de la Secretaría de Turismo y Deporte, donde había funcionarios cercanos a Scioli, el vicepresidente no quiso profundizar en el tema.
Tampoco quiso responder cuando le preguntaron si "sabía que Kirchner era así", y sólo se limitó a señalar: "No voy a calificar al Presidente".
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