Bush salió a pedir un plan para el calentamiento global

En un giro sobre posturas anteriores dijo que reclamará medidas contra el cambio climático

WASHINGTON.- El presidente estadounidense, George W. Bush, dijo ayer que urgirá a los principales países industrializados, en la cumbre del Gruo de los 8 (los siete países más ricos del mundo y Rusia) la semana próxima, a unirse en un nuevo marco global para luchar contra el cambio climático, luego que venza el protocolo de Kyoto, que el propio Bush se negó a que su país suscribiera.

"Estados Unidos trabajará con otros países para establecer un nuevo marco sobre las emisiones de gases de efecto invernadero para cuando expire el protocolo de Kyoto en 2012", indicó en un discurso sobre su agenda para la reunión del Grupo de los 8 en Alemania, del 6 al 8 de junio.

En un momento en el que sufre fuertes críticas por la guerra en Irak y su enfoque hacia el calentamiento global, el mandatario también llamó a los países ricos a eliminar en 2008 las barreras que enfrentan los países pobres para obtener nuevas tecnologías más amigables con el medio ambiente.

"Si uno está realmente comprometido en ayudar al medio ambiente, los países deben liberarse de sus aranceles, deben liberarse de esas barreras que impiden que las nuevas tecnologías lleguen a sus países", indicó.

La iniciativa de Bush podría profundizar una disputa con Alemania, que actualmente preside el Grupo de los 8 y que busca una resolución fuerte para combatir el cambio climático en la próxima cumbre.

"Mi propuesta es esta: para el fin del año próximo, Estados Unidos y otros países establecerán un objetivo global de largo plazo para la reducción de los gases de efecto invernadero" en consulta con las principales naciones que producen estos gases, incluidas India y China, con fuerte crecimiento, y los líderes industriales, dijo Bush.

Los países también establecerían "objetivos y programas nacionales de mediano plazo", según "su propia mezcla de fuentes energéticas y futuras necesidades energéticas", añadió, explicando que habría un método "fuerte y transparente" para evaluar el avance en el logro de las metas, que no serían obligatorias.

La lucha contra el calentamiento global es una de las principales diferencias entre estadounidenses y europeos. Bush, cuyo país es el mayor emisor mundial de gases de efecto invernadero, se opone a establecer objetivos obligatorios de reducción de esas emisiones, invocando el interés de la economía. Destaca además que esas obligaciones no tienen sentido si países como India o China, con una demanda energética en crecimiento exponencial, no se ven igualmente obligadas. Estos países considerados emergentes están exentos de las disposiciones del protocolo de Kyoto, que Estados Unidos se negó a ratificar.

Ante un aumento de la toma de conciencia mundial sobre el tema, la comunidad internacional intenta ponerse de acuerdo en un régimen posterior al protocolo de Kyoto. Pero poco antes de su cumbre la semana próxima, los grandes países industrializados tienen dificultades para ponerse de acuerdo en una declaración común sobre el clima.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE