Nueva acusación roza al Pontífice
| 3 de Abril de 2010 | 00:00

Benedicto XVI estaba a cargo de manejar un caso de abuso sexual cometido por un padre de Arizona antes de ser Papa, pero esperó más de 10 años para emprender alguna acción a pesar de que un obispo le imploró que expulsara al acusado, según correspondencia del Vaticano.
Los documentos revisados y difundidos en forma exclusiva por la agencia internacional Associated Press muestran que en 1990, integrantes de un tribunal de la Iglesia católica concluyeron que el padre Michael Teta había abusado de niños, incluyendo acusaciones de que cometió las vejaciones en un confesionario en Arizona, y consideraron que su comportamiento era casi "satánico".
El tribunal elevó el caso al entonces cardenal Joseph Ratzinger, pero se necesitaron 12 años para que Ratzinger firmara una carta con la que se ordenaba que Teta fuera retirado del cargo formalmente, una medida que sólo el Vaticano puede aprobar.
El descubrimiento llega en un momento en que la Iglesia enfrenta acusaciones en múltiples países, dirigidas al actual Papa, por no lograr que sacerdotes pedófilos fueran debidamente castigados.
LOS CASOS
Teta fue acusado de cometer abusos poco después de su llegada a la diócesis de Tucson, Arizona, en 1978. Entre otras cosas se le acusaba de abusar de dos niños de 7 y 9 años en el confesionario cuando se preparaban para la Primera Comunión.
El obispo Manuel Moreno, a cargo de Teta, se enteró de las acusaciones y realizó un juicio canónico en el que determinó que "su forma de actuar contra jóvenes y niños era casi satánica". Ratzinger dijo a Moreno en 1992 que él se encargaría del caso. El obispo escribió a Ratzinger cinco años después pidiéndole urgentemente que apartara del sacerdocio a Teta, pero esto no ocurrió sino hasta el 2004.
Los documentos revisados y difundidos en forma exclusiva por la agencia internacional Associated Press muestran que en 1990, integrantes de un tribunal de la Iglesia católica concluyeron que el padre Michael Teta había abusado de niños, incluyendo acusaciones de que cometió las vejaciones en un confesionario en Arizona, y consideraron que su comportamiento era casi "satánico".
El tribunal elevó el caso al entonces cardenal Joseph Ratzinger, pero se necesitaron 12 años para que Ratzinger firmara una carta con la que se ordenaba que Teta fuera retirado del cargo formalmente, una medida que sólo el Vaticano puede aprobar.
El descubrimiento llega en un momento en que la Iglesia enfrenta acusaciones en múltiples países, dirigidas al actual Papa, por no lograr que sacerdotes pedófilos fueran debidamente castigados.
LOS CASOS
Teta fue acusado de cometer abusos poco después de su llegada a la diócesis de Tucson, Arizona, en 1978. Entre otras cosas se le acusaba de abusar de dos niños de 7 y 9 años en el confesionario cuando se preparaban para la Primera Comunión.
El obispo Manuel Moreno, a cargo de Teta, se enteró de las acusaciones y realizó un juicio canónico en el que determinó que "su forma de actuar contra jóvenes y niños era casi satánica". Ratzinger dijo a Moreno en 1992 que él se encargaría del caso. El obispo escribió a Ratzinger cinco años después pidiéndole urgentemente que apartara del sacerdocio a Teta, pero esto no ocurrió sino hasta el 2004.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE