Tras 43 días internada, le dieron de alta a Carolina
Se refugió en un country afuera de La Plata. Le asignaron una custodia especial
| 10 de Septiembre de 2010 | 00:00
De muy buen humor, en silla de ruedas y reconocida por algunas de las personas que cruzó camino a la salida, Carolina Piparo (34) dejó, ayer a la tarde el hospital San Roque de Gonnet, donde permaneció 43 días internada luego de haber sido baleada en una salidera bancaria en La Loma, el pasado 29 de julio.
Matías, hermano de Carolina, confirmó anoche en declaraciones a la prensa realizadas en el lugar donde se produjo el brutal ataque, que su hermana había dejado cerca de las 17 el hospital y que continuará con la recuperación en un country ubicado afuera de La Plata (ver aparte).
Para la semana próxima está prevista la declaración de la víctima en la causa judicial. Un testimonio muy esperado ya que el propio hermano de Carolina afirmó que "ella se acuerda de todo".
Trascendió entre allegados a la familia que al lugar donde vivirá Carolina en los próximos meses, le fue asignada una custodia especial. Explicaron en ese sentido que "es como la vigilancia que se les coloca a testigos de identidad reservada", eso quiere decir que no está a cargo de un patrullero sino de policías de civil en un auto no identificable.
EL MARIDO Y SU MADRE
En relación al alta médica, trascendió que una enfermera y un custodio privado del San Roque llevaron en silla de ruedas a la joven hasta la salida por donde se accede a la guardia. Allí la aguardaba el marido en un auto.
El matrimonio y la madre de ella, María Emma Cometa (59), partieron así sin hacer declaraciones hasta un country afuera de La Plata, donde continuará la víctima su recuperación y empezará a asimilar el duro golpe que significó la muerte de su hijo Isidro, que había nacido en una cesárea de urgencia luego del ataque.
Allegados al hospital señalaron que la joven fue reconocida por algunas personas que se encontraban en la guardia, quienes en su mayoría la saludaron y le desearon que tuviera fuerza para lo que viene. Piparo, con una manta en sus pies, respondió con sonrisas antes de abandonar el San Roque.
EXPLICACION MEDICA
Al confirmar y justificar el alta médica, el director del Hospital, Daniel Angeleri, indicó que la la mujer "terminó con el tratamiento de antibióticos que se le había prescripto y así se podía retirar".
"Ella está bien, se fue del hospital caminando por sus propios medios y al mediodía (por ayer), cuando tuve una charla con ella la encontré muy entera", dijo Angeleri.
Dijo que tuvo con Carolina "una charla distendida y me agradeció todo el trabajo que hizo con ella la gente del hospital".
"Se ha recuperado magníficamente en este tiempo pero se fue con las secuelas propias de una prolongada internación", señaló el profesional.
Al mediodía el propio Angeleri afirmó que el alta se la darían hoy, pero por la tarde los tiempos se aceleraron y se retiró junto a parte de su familia. Algunos especularon que la decisión tuvo como finalidad el asedio periodístico.
Cabe remarcar que desde temprano la mayoría de los medios de prensa se había apostado en la entrada principal del hospital de Gonnet, sobre la calle 508, pero finalmente Carolina salió por la puerta por la que se accede a la guardia, sin hablar con nadie.
Matías, hermano de Carolina, confirmó anoche en declaraciones a la prensa realizadas en el lugar donde se produjo el brutal ataque, que su hermana había dejado cerca de las 17 el hospital y que continuará con la recuperación en un country ubicado afuera de La Plata (ver aparte).
Para la semana próxima está prevista la declaración de la víctima en la causa judicial. Un testimonio muy esperado ya que el propio hermano de Carolina afirmó que "ella se acuerda de todo".
Trascendió entre allegados a la familia que al lugar donde vivirá Carolina en los próximos meses, le fue asignada una custodia especial. Explicaron en ese sentido que "es como la vigilancia que se les coloca a testigos de identidad reservada", eso quiere decir que no está a cargo de un patrullero sino de policías de civil en un auto no identificable.
EL MARIDO Y SU MADRE
En relación al alta médica, trascendió que una enfermera y un custodio privado del San Roque llevaron en silla de ruedas a la joven hasta la salida por donde se accede a la guardia. Allí la aguardaba el marido en un auto.
El matrimonio y la madre de ella, María Emma Cometa (59), partieron así sin hacer declaraciones hasta un country afuera de La Plata, donde continuará la víctima su recuperación y empezará a asimilar el duro golpe que significó la muerte de su hijo Isidro, que había nacido en una cesárea de urgencia luego del ataque.
Allegados al hospital señalaron que la joven fue reconocida por algunas personas que se encontraban en la guardia, quienes en su mayoría la saludaron y le desearon que tuviera fuerza para lo que viene. Piparo, con una manta en sus pies, respondió con sonrisas antes de abandonar el San Roque.
EXPLICACION MEDICA
Al confirmar y justificar el alta médica, el director del Hospital, Daniel Angeleri, indicó que la la mujer "terminó con el tratamiento de antibióticos que se le había prescripto y así se podía retirar".
"Ella está bien, se fue del hospital caminando por sus propios medios y al mediodía (por ayer), cuando tuve una charla con ella la encontré muy entera", dijo Angeleri.
Dijo que tuvo con Carolina "una charla distendida y me agradeció todo el trabajo que hizo con ella la gente del hospital".
"Se ha recuperado magníficamente en este tiempo pero se fue con las secuelas propias de una prolongada internación", señaló el profesional.
Al mediodía el propio Angeleri afirmó que el alta se la darían hoy, pero por la tarde los tiempos se aceleraron y se retiró junto a parte de su familia. Algunos especularon que la decisión tuvo como finalidad el asedio periodístico.
Cabe remarcar que desde temprano la mayoría de los medios de prensa se había apostado en la entrada principal del hospital de Gonnet, sobre la calle 508, pero finalmente Carolina salió por la puerta por la que se accede a la guardia, sin hablar con nadie.
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