Para Gimnasia, un muy mal trago

Y sí, alguna vez iba a pasar. Llegó la primera derrota desde que comenzó la "era Troglio", hace poco menos de un mes y medio. Después de cinco encuentros donde aún no había perdido, llegó esta derrota ante Quilmes, que no es para dramatizar, pero pone un toque de alerta. Lo pudo haber perdido peor, y también haberlo empatado luego de una buena ráfaga en el inicio del complemento donde logró descontar. Pero a su vez, quedó claro que le faltó juego. Sí, otra vez careció de lo mismo, y ya se había visto en el 0 a 0 pasado ante Independiente Rivadavia de Mendoza en el Bosque.

También le pasaron cosas en momentos claves. En 12 minutos perdió a los dos volantes centrales (Capurro por lesión y Miloc por expulsión), y estaba abajo en el marcador 1-0. Cuando no se había recuperado de esos cachetazos, sobre el final de la etapa llegó el segundo del local.

Por eso, más allá de haber perdido tres puntos, la excursión a Quilmes fue negativa por donde se la mire. Volvió a tener un lesionado (Capurro), un expulsado (Miloc), y si de algo se jactaba este proceso, era que en cinco partidos, tan solo había recibido un gol en contra, y que encima fue de Macaluso en contra con Boca Unidos. Y anoche le metieron tres, y pudieron ser algunos más de no ser por la buena tarea de Monetti.

Como equipo se siguió desdibujando. Ese gol de Vittor apenas segundos de haber arrancado el complemento le dieron esperanza. Pudo haber empatado, pero el travesaño y el arquero Trípodi, lo evitaron. Pero fueron unos minutos, físicamente se quedó y los locales fueron más.

El tercer gol llega también porque herido, el Lobo fue a jugarse sus últimas fichas, y cuando eso sucede, indefectiblemente corrés riesgos y te descuidás atrás. Y eso pasó.

Para colmo de males, ni los ingresos de jugadores de muy buen pie como Alan Ruiz y Gonzalo Choy ayudaron, al contrario, el equipo pareció quedarse cada vez más.

Será semana de replanteo, análisis y volver a barajar y dar de nuevo. No es grave, el partido se dio así, vino mal desde el primer momento y Gimnasia nunca pudo encontrarle la vuelta y ser más que su rival. Por eso decimos que perdió más que tres puntos, porque en el medio de la derrota, la oleada arrastró un nuevo lesionado, un expulsado, no hubo juego claro como ante los mendocinos, y un funcionamiento defensivo (esto es general, no solo mirando a la defensa) que esta vez recibió tres cachetazos.

De esta manera, el "ciclo Troglio" tiene 3 victorias, 2 empates y 1 derrota. Esto recién está empezando, y seguramente el técnico sabe como arreglar lo ocurrido y dejar atrás este mal trago que tuvo anoche en Quilmes.