De la fotografía al rescate cultural de pueblos olvidados

Como Juan Viel, también Leandro Vesco se largó un día a viajar por recónditos pueblos bonaerenses con la idea de tomar fotografías. Pero al poco tiempo, la iniciativa se transformó en otra cosa y Vesco conformó una ONG que desde 2012 trabaja para dotar a esos mismos pueblos de bibliotecas populares, poner en valor pulperías, haciéndolas aptas para el turismo y organizar donaciones para escuelitas rurales en peligro.

Leandro Vesco es periodista y se entusiasma cuando habla de las últimas campañas que llevó adelante en pueblos como Krabbe, en el partido de Coronel Pringles, un lugar donde viven apenas cuatro habitantes, pero en cuyas escuelas estudian diez chicos de las inmediaciones.

En esa escuela, dicen, pudieron poner Internet a través de un convenio con empresas del sector y obtener agua potable.

“Las escuelas son el corazón de esos pueblos y recorriendo uno va descubriendo que muchas de esas escuelitas están hoy en peligro”, dice Vesco.

Caminar los caminos vecinales que llevan a los pueblos olvidados llevó a Vesco a escuchar otro tipo de reclamos. Los pobladores que quedan, se quejan por el estado de los caminos, que frecuentemente los aísla y también por la falta de oportunidades laborales.

“La economía rural de sus pueblos está resquebrajada y endeble, porque la agricultura se ha tecnificado mucho, ya no requiere tanta mano de obra y la principal fuente de trabajo en esta región es el campo”, dice Vesco.

El trabajo de la ONG, que se llama Proyecto Pulpería, aparece en un perfil de facebook del mismo nombre. Para colaborar, se puede escribir a info@proyectopulería.com.ar.

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