Por culpa de Racing, el debut de Boca fue un gran papelón

Jugó la mayor parte del tiempo con nueve y se comió cuatro

E l de Jonathan Calleri seguro que va a ser el gol más rápido de este verano, porque recién se habían cumplido 30 segundos cuando el atacante aprovechó un lateral que viajó desde la derecha para poner en ventaja a Boca sobre Racing en lo que fue el partido inaugural de la Copa Ciudad de Mar del Plata, que completa Vélez.

La cabeza de los marcadores de la Academia pareció estar todavía en los festejos por el campeonato ganado luego de más de una década, porque en realidad se trató de un intento, el boquense, que la defensa debió resolver sin complicaciones.

Se afirmó Boca, y a partir de la dinámica que mostró para mover la pelota, más la sorpresa que representó Cristian Pavón, el juvenil que regresó de Colón de Santa Fe, desarrolló un par de ataques a fondo que volvieron a complicar a los que esperaban delante de Saja.

Le costó armarse a Racing, pero de a poquito encontró su juego, el mismo que lo llevó a gritar campeón el año pasado. Las salidas rápidas fueron una complicación cada vez mayor para una defensa de Boca que ni bien empezaron a llegarle, hizo agua por todos lados.

Llegó Centurión por la izquierda, Orión le tapó el empate a Bou, y el goleador de Racing se dio el gusto de gritar la igualdad cuando a los 17 minutos sacó provecho, ahora si, de un pelotazo largo que Milito dejó pasar y ubicó junto a un palo.

La fórmula fue imposible de resolver para una defensa que se paró en línea, y a los 23 volvió a pagar cuando en una jugada rápida se encontraron Centurión, Bou y Milito, que convirtió entrando por el medio.

En partido se transformó de manera increíble tras aquel mejor comienzo de Boca, más todavía cuando de pronto el equipo Xeneize se quedó con dos menos por las expulsiones de Cristian Erbes y Leandro Marín, quienes le entraron fuerte a Centurión, y se fueron por roja directa.

Erbes extendió sus brazos y con el puño izquierdo le pegó en la cara al juvenil de Racing, quien estaba encendido, marcando diferencias, y Marín le entró muy fuerte al zurdo de atrás, golpeándolo en el gemelo de la pierna izquierda cuando se disponía a recibir la pelota.

Boca con nueve y Racing sin Centurión, el juego continuó sin que la Academia pudiera marcar semejante diferencia, hasta que en el cierre del primer tiempo, en una jugada similar a las anteriores, Bou empujó una pelota que cruzó Pillud y se llevó por delante Claudio Pérez haciéndola rebotar en el arquero.

La segunda parte estuvo de más, porque los dos goles de diferencia, más la ventaja numérica también para el conjunto de Avellaneda en lo que respecta a cantidad de jugadores, dejó a Boca lejos de cualquier intento.

Se abroqueló atrás el conjunto que dirige Rodolfo Arruabarrena, el técnico que después de la actuación de anoche seguro pedirá urgente refuerzos para la defensa, y el último campeón del fútbol argentino bajó los decibeles.

Así y todo, recién ingresado, Brian Fernández, el goleador que llegó de Defensa y Justicia, hizo un desparramo dentro del área y le sirvió el 4-1 a Gustavo Bou.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE