Escándalo por cadáver que se perdió en un hospital

El cadáver de una mujer que había desaparecido de una clínica de San Justo y recién fue localizado ayer en Burzaco, donde fue entregado por error a otra familia y estuvo a punto de ser cremado, dió lugar a un escándalo entre las autoridades hospitalarias y los familiares de la mujer, quienes advirtieron que iniciarán acciones legales.

El hijo de Secundina Pérez, de 79 años, fue a buscar los restos de su madre a la clínica Los Cedros, de San Justo, en el partido bonaerense de La Matanza, donde falleció el lunes, pero las autoridades le dijeron que el cuerpo no estaba allí.

“Me mostraron cuerpos y me dicen ‘acá está Secundina Pérez’, pero no era Secundina Pérez. Yo ya la había reconocido previamente y me había llevado las pertenencias de mi mamá, pero después no estaba”, dijo el hombre, llamado Daniel.

A raíz de la denuncia y tras casi 48 horas de búsqueda, el cuerpo de la mujer fue hallado en un crematorio de la localidad bonaerense de Burzaco, donde había sido entregado por error a otra familia, que tenía previsto cremarlo.

“No la cremaron ayer porque faltó un papel”, dijo otro de los familiares de Pérez.

En tanto, el hijo de la mujer apuntó contra las autoridades de la Clínica Los Cedros y ratificó que iniciará acciones legales.

“El cuerpo que ellos iban a cremar era mi madre y el que tenían que cremar ellos está acá en la clínica. Ninguna autoridad de la clínica se hizo responsable de nada ni nos explicó nada, ni siquiera se acercaron a preguntarnos”, señaló.

Los familiares de Pérez habían radicado la denuncia en la comisaría primera de San Justo ante la falta del cuerpo de Pérez.

“Los policías no nos creían, decían que era un chiste, pero no, es verdad”, sostuvo.

“Esta mañana (por ayer) la policía nos avisó que mi madre fue encontrada en Burzaco. Aún no sabemos cómo fue que le entregaron el cuerpo a otra familia, pero nos dijeron que esta allá y que iba a ser cremada”, dijo el hijo de la mujer, quien destacó que “lo más importante es que la encontramos”.

Secundina Pérez murió el lunes en la clínica Los Cedros, que atiende a jubilados del PAMI, luego de haber sido internada por un fuerte dolor abdominal.

“Mi abuela ingresó a la clínica en horas de la mañana con un fuerte dolor, y le dijeron que tenía inflamado los intestinos y le aplicaron dos inyecciones, y pocas horas después hizo un paro cardiorrespiratorio del que no pudo salir”, manifestó la nieta de la mujer, de nombre Andrea.

Lo insólito del caso no solo es cómo llegó un cuerpo equivocado a Burzaco, sino también la forma en que fue comunicada la familia.

“Cuando murió mi mama fui a despedirla -contó ayer su hijo Daniel- la reconocí, di su nombre, sus datos, me entregaron un acta y las pertenencias de mamá”.

“Al otro día -agregó- fui nuevamente a identificar el cuerpo para que la cochería se haga cargo del sepelio y me dicen ‘bueno, Secundina Pérez está acá’, y les digo ‘no, esa no es mi madre’, y entonces me muestran otros cuerpos y ninguno de ellos era el de mi madre. Hoy apareció en Burzaco, pero aún no sabemos cómo fue que le entregaron el cuerpo a otra familia”.