Tiempo de acondicionar la piscina

Al comenzar los días de buen tiempo y los primeros calores advierten sobre la necesaria preparación de la piscina para la temporada de verano.

Se trata de una tarea no siempre agradable, pero que permitirá disfrutar a pleno de un lugar de esparcimiento donde combatir el calor. Es decir que bien vale el esfuerzo.

Lo primero que se debe hacer, es vaciar la piscina. Una vez realizado esto, limpiar la superficie con lavandina diluida, o algún otro producto para quitar los microorganismos que pueden haber quedado sobre las paredes, por ejemplo algas y hongos.

Luego se debe verificar el revestimiento de la piscina, se deben tapar las grietas y hendiduras que hubiera en el revoque o en las juntas, si el revestimiento fuera de cerámicos.

Las grietas pueden rellenarse con productos específicos existente en el mercado.

Se debe tener la precaución de eliminar todas las partes flojas con cepillo y lijar hasta lograr una superficie pareja. Luego e debe dejar pasar 48 horas antes de pintar.

La pintura se aplicará a pincel, si fuese necesario se utilizará diluyente para piletas de natación.

Si se emplea soplete es recomendable diluir el producto en dos partes de pinturas y una de diluyente.

En superficies nuevas se puede usar como fondo una primera mano de pintura para piletas de natación en relación 2:1 con diluyente y como terminación dos manos de pinturas para piletas de natación sin diluir.

No pintar si existe rocío, ni a pleno sol de verano y una ves pintada dejar secar unas 48 horas.

MANTENIMIENTO DEL AGUA

Una vez reparada y pintada la superficie de la piscina, hay que tratar el agua. El cloro mantiene limpia y cristalina el agua. Su función es destruir microorganismos como bacterias y hongos.

Para que actúe el cloro, el ph del agua (de la piscina) debe estar comprendido entre 7,2 y 7,6. Así se logra una mayor eficiencia en su uso ya que si se está debajo de ese nivel, o más alto, el cloro no actúa.

El ph es el nivel de acidez y alcalinidad del agua. Los valores de ph están comprendidos entre 0 y 14, correspondiendo el valor 7 al grado neutro, los valores entre 0 y 7 a los grados ácidos y entre 7 y 14 a los alcalinos, si bien los valores usuales en una piscina son los comprendidos entre los valores 7,2 y 7,6.

Para llegar a estos valores se puede utilizar algún producto incrementador de ph o reductor de ph.

Al agregar agua nueva a la piscina analizar el ph y el cloro y ajustarlos.

Para medir el ph podemos utilizar phmetro o un papel indicador de ph, que es lo más recomendable.

También hay que tener en cuenta que se debe duplicar la dosis de cloro cuando haya llovido o si la piscina la ha usado mucha gente.

La formación de algas causa agua verde y superficies resbaladizas, por eso se debe añadir antialgas cada vez que entre agua nueva a la piscina, el agua nueva sin tratar es más propicia a crear algas que la que tiene ya la piscina.

Se debe dejar la bomba funcionando todos los días, y filtra el agua en horario diurno.