Obama a los jóvenes: “Pueden crear el mundo que quieren”

Distendido, sin saco y en mangas de camisa, de pie y desplazándose sobre el escenario, Obama dedicó una hora y media a “charlar” con unos mil jóvenes -estudiantes, empresarios, líderes comunitarios e investigadores- congregados en la Usina del Arte, en pleno corazón de La Boca. Allí, el presidente de Estados Unidos instó a “entender las diferencias” y “olvidar los debates del pasado”. Y agregó invitando a los presentes a mirar el futuro: “Ustedes pueden crear el mundo como quieren que sea”.

Ovacionado como una estrella, Obama confesó que deseaba viajar a Buenos Aires desde que era joven, cuando, a través de la lectura de Jorge Luis Borges y Julio Cortázar, dos de los máximos referentes de las letras argentinas, quedó “fascinado” con la ciudad.

LOS SUEÑOS DE SUS HIJAS

Contó que también deseaba que sus hijas, Sasha y Malia, conocieran Buenos Aires, pero, bromeó, las adolescentes quieren ahora salir por Palermo, un deseo que no podrán cumplir por lo que “tendrán que volver cuando sean más grandes”.

Aún siendo el líder de la primera potencia mundial, Obama admitió que tampoco podrá cumplir otros de los sueños de sus hijas: conocer al astro futbolístico argentino Lionel Messi.

En una dinámica de preguntas y respuestas, el mandatario estadounidense se mostró interesado en conocer algunas de las experiencias personales de sus interlocutores, a quienes brindó mensajes de aliento e inspiración.

En reiterados momentos, Obama destacó la necesidad de “trabajar juntos” y “entender las diferencias”, y aseguró que “los conflictos aparecen por algunas debilidades, y entonces queremos a atacar a quienes no son como nosotros”.

En este punto, remarcó que “algo importante para avanzar es que nos escuchemos”, y ratificó su “fe y esperanza” porque “en la trayectoria de la historia, la humanidad siempre ha mejorado, quizá no en línea recta”: “El mundo hoy es menos violento de lo que fue hace 50 ó 100 años atrás”, expresó. Así, consultado sobre educación, agradeció a Macri por comprometerse a enviar mil jóvenes para que se capaciten en Norteamérica, al tiempo que realizó una defensa del rol del mercado en las sociedades.

En ese sentido, destacó la educación y la expectativa de vida en Cuba pero aseguró que allí “la economía no funciona desde hace 50 años”. Además, dijo que aún espera una “solución justa” para israelíes y palestinos. Y terminó diciendo: “Hay líderes que piensan en el bien de la gente y otros que sólo piensa cuanto van mantenerse en el poder”.