Comerciantes y empresarios piden un protocolo para frenar los ataques de menores

Escruches, asaltos a mano armada, robos “piraña”, vandalismo. El centro platense se ha convertido en el último tiempo en una suerte de menú a la carta para los delincuentes, que actúan la mayor parte del tiempo amparados por la noche, aunque otras veces a cara descubierta a plena luz del día.

Dueños y empleados de los comercios afectados dirigen sus reclamos sobre todo contra un grupo de menores que actúa “sabiendo que son impunes y que en una hora se van caminando de la comisaría”, aseguran con enojo.

Otro de los reclamos duros de los damnificados apunta a la “falta de vigilancia”, algo que se volvió a plantear el viernes tras los golpes contra locales ubicados entre las plazas Italia y Moreno.

La escalada de delitos motivó un pedido de la Federación Empresaria de La Plata hacia los funcionarios y las fuerzas policiales, que tuvo como resultado una reunión la semana pasada, donde se trataron estos temas en más profundidad.

Gustavo Vetere, titular de la entidad, explicó en diálogo con EL DIA los pormenores de la situación y cuál es el pedido que elevaron a las autoridades.

“Después de hablar con el Sindicato de Empleados de Comercio y con los propietarios, porque es una problemática que está presente y afecta a todos, decidimos involucrarnos directamente”, dijo.

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En ese sentido, señaló: “Vemos que en la mayoría de estos casos hay muchos chicos menores, a veces muy menores. Por eso planteamos que lleven a cabo algún tipo de acción para ver cómo se puede tratar esa problemática, que está instalada y debe abordarse ya”.

Para Vetere y las personas perjudicadas, no se trata de una cuestión que competa meramente a las fuerzas de seguridad, sino que hay una “coyuntura social que la atraviesa”.

“Hay que ver de qué manera se puede atacar, tal vez haciendo una campaña con el Municipio para que los empleados y dueños sepan con quién comunicarse, porque muchas veces la Policía no es la indicada para actuar”, sostuvo el empresario.

Por otra parte, Vetere asegura que la mejor forma de combatir la problemática es “buscando métodos de prevención”, y por ello “esta semana nos vamos a volver a juntar con la gente de la Comuna para planificar alguna medida conjunta, para lo cual queremos involucrar a la Provincia”.

Por su parte, el dirigente del Sindicato de Empleados de Comercio, Alberto Roteño, manifestó que “si bien esto no es nuevo, en los últimos dos años se agravó la situación”.

“Fue una presentación muy positiva de las partes. Se demostró buena intención para llevar adelante esta problemática, si bien en la mesa faltan actores”, apuntó el secretario de Desarrollo Social, Raúl Cadaa.

El funcionario coincidió en que “es un tema con muchas aristas” que requiere “soluciones concretas: cómo ayudar a esas familias de la periferia para que se desarrollen en ese ámbito, que los padres puedan trabajar -tenemos un área que podría ayudarles en este aspecto- y los chicos acudir a la escuela”.

Un problema social

“Generalmente actúan grupos de chicos que no superan los 14 años, se meten en los negocios y van robando mercadería pequeña o directamente arrebatan lo que ven a mano y salen corriendo”, describió un vendedor de la zona de 47 entre 7 y 8.

“Algunos”, agregó la fuente, “tienen una conducta agresiva que nosotros no podemos manejar”.

Por eso, como se dijo, desde el enclave comercial solicitaron a la Municipalidad la creación de un protocolo de trabajo.

Se planteó de modo puntual la posibilidad de establecer una forma de contacto rápido con funcionarios del Servicio de Atención a la Niñez y Adolescencia y a los operadores de calle con que cuenta el Municipio, cuya función es detectar menores en situaciones de riesgo para que se dispongan medidas de ayuda a ellos y sus familias.

Las últimas estadísticas publicadas por la Procuración General indican que, de los 2.508 delitos cometidos por menores en la Región de los que se tiene registro en 2016, los relacionados con robos suman 817, casi el 33% del total.

En tanto, el vandalismo representa cerca del 5%, con 118 incidentes asentados.

No obstante, los voceros consultados concuerdan en graficar que a partir de este año el asunto empeoró notablemente, tanto en cantidad de hechos ilícitos como en la violencia empleada para cometerlos.

Esa circunstancia podría verse reflejada en breve, cuando se den a conocer los números correspondientes al año 2017.

Por otro lado el Ministerio de Seguridad bonaerense informó que del 1º de enero de 2018 al 15 de febrero inclusive, quedaron judicializados 35 chicos por hechos delictivos.