Cande y Paulo, una historia soñada: de un cover viral a grabar con Decca
Edición Impresa | 17 de Noviembre de 2020 | 03:16

Un contrabajo, el de Cande Buasso. Un teclado, el de Paulo Carrizo. Una guitarra. Y la voz, suntuosa, profunda, repleta de matices y sorpresas, de Buasso: con esos tres elementos, una apuesta minimalista cargada de jazz e intimidad, Cande y Paulo compusieron hace tres años una versión de “Barro tal vez” que supera hoy los 11 millones de reproducciones en la plataforma de videos. Fue el principio de una gran aventura: la dupla, que realizó en aquella ocasión, como parte de un homenaje a Spinetta organizado por la municipalidad de San Juan, su primera colaboración, decidió que las cosas funcionaban bien entre los dos, e iniciaron un camino que los llevaría a Los Angeles y Londres, a firmar con Decca y grabar con Larry Klein. Un sueño.
“Fue el primer tema con el que trabajamos juntos: lo grabamos para un homenaje a Spinetta, y de golpe empezó a tener vistas”, recuerda aquella explosión, un Big Bang para sus carreras, Paulo, en diálogo con EL DIA. Y Cande revela que más que juntarse ellos, “nos juntaron: el evento lo organizaba la municipalidad de San Juan, y la organización nos designó ‘Barro tal vez’, juntos. Fue muy al azar”.
El éxito del tema los llevó a viajar a Barcelona, donde Paulo tenía algunos compromisos musicales, con el plan de grabar un disco. Y lo hicieron. Pero al volver a casa “recibimos un llamado de Inglaterra, de Decca: una locura, no sabíamos si era de verdad”: el emblemático sello que grabó a Elvis y los Stones (y que rechazó a Los Beatles) quería firmar con ellos. “Nos dijeron que esperáramos para lanzar el disco, porque ellos querían trabajar con nosotros”, cuenta Paulo. Viajaron así a Londres, donde el disco comenzó su proceso de reedición y mezcla: “Imaginate que lo habíamos bancado nosotros”, cuenta sobre la primera versión del álbum. La nueva versión sostiene su alma despojada, íntima, pero agrega dimensiones y capas a la propuesta: la diferencia puede escucharse googleando aquella primera versión de “Barro tal vez” y la que saldrá en el álbum en mayo, y que ya se puede oír a modo de adelanto.
Los viajes no se terminaron ahí: Cande y Paulo cruzaron luego el océano para ser producidos por Larry Klein, ganador de varios premios Grammy, en Los Ángeles: allí se cerró un disco que contiene versiones de canciones de Atahualpa, Lou Reed y Cat Stevens (que “nos enteramos que escuchó la versión, algo muy loco”, dicen) y otros. Los adelantos han ido viendo la luz en estos meses, y hace algunas semanas apareció en las bateas digitales su cover de “Treaty”, emblemática canción de Leonard Cohen, amigo íntimo de Klein.
“Fue muy emocionante: salió para el aniversario de la muerte de Leonard Cohen, y Larry era muy amigo de Cohen... Estaba muy contento de poder homenajear a su amigo”, comenta Paulo. “La experiencia de tomar una canción de Leonard Cohen junto a su amigo y colaborador Larry Klein es demasiado difícil de explicar con palabras. Es profunda y nos ha enseñado humildad pero dejaremos que la música hable por sí sola… Esperamos haberle hecho justicia y a cambio celebrar a Leonard, su música y su vida”, agrega.
Y comenta que al abordar a Cohen y otros artistas icónicos, “a uno le tiembla la mano: son auténticos genios, héroes musicales. Son canciones que hay que tratar con mucho cuidado, como una pieza de museo, porque uno siente que puede arruinar todo. Fue una montaña difícil de subir”.
Cande y Paulo los abordan con esa propuesta minimalista que defienden desde los accidentales inicios del dúo: los pocos elementos permiten, dice Paulo, hacer aflorar la esencia de las melodías y las composiciones: “Es una manera de explorar al compositor desde adentro”.
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