Baja aceptación a la oferta de canje de la Provincia, que le puso un nuevo plazo

El gobierno de Kicillof estiró hasta el 26 de mayo para que los bonistas sienten postura. Por ahora, el rechazo sería amplio

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Con una jugada que buscó ganar tiempo, la provincia de Buenos Aires logró esquivar anoche entrar oficialmente en cesación de pagos, al extender hasta fin de mes la negociación con los bonistas por el canje de unos 7.150 millones de dólares de deuda.

La decisión se tomó en línea con lo resuelto a nivel nacional por el ministro de Economía Martín Guzmán, que ayer también extendió el plazo para el canje de la deuda.

A diferencia de Guzmán, que reconoció que la adhesión a la propuesta nacional fue baja, en la Gobernación no brindaron información sobre el nivel de aceptación que tuvo hasta ahora la oferta de canje lanzada por Axel Kicillof.

La decisión de prorrogar hasta el 26 de mayo las conversaciones con los bonistas fue tomada, trascendió ayer, ante la escasa aceptación que tuvo la propuesta del gobierno bonaerense, que planteaba un período de gracia de tres años y quitas en los intereses y el capital de la deuda.

Ayer a las 17 horas vencía el plazo de gracia para que la Provincia acuerde, pague o caiga en default por la deuda con acreedores privados nominada en dólares

Ayer, en rigor, caducaban los plazos de dos vencimientos por U$S 110 millones: el bono BPMD, con vencimiento de capital por U$S 10,62 millones y U$210.000 de intereses, y el BPME, por 95,38 millones de euros en capital y 1,91 millones de euros. Los dos bonos son parte de un total de once bonos por U$S S 7.148 millones que el gobierno de Kicillof quiere reestructurar.

Después de la pulseada con los bonistas de enero pasado, el gobierno bonaerense hizo a principios de abril una nueva oferta formal a los tenedores de bonos emitidos bajo ley de Nueva York.

En concreto, el Gobierno había ofertado un canje de bonos por 7.148 millones de dólares, con una quita del 55 por ciento en los intereses y un 7 por ciento en el capital, más un plazo de gracia de 3 años.

Es decir, una propuesta en términos muy similares a la presentada por Guzmán.

Los bonistas rechazaron en varias ocasiones la propuesta a través de declaraciones públicas. Y presentaron una contrapropuesta, cuyos términos no trascendieron pero que fue rechazada de plano por la Provincia.

Ayer, ante la baja aceptación que se manifestó, el gobierno de Kicillof salió a anunciar una prórroga en el plazo para el cierre de las negociaciones, con un comunicado en el que volvió a hablar de una “deuda insostenible”.

Comunicado oficial

“En el marco de los esfuerzos llevados adelante en pos de recuperar la sostenibilidad de su deuda pública, la provincia de Buenos Aires anuncia la extensión del plazo para aceptar la propuesta realizada a los tenedores de los Bonos Elegibles hasta el día 26 de mayo”, dice el comunicado emitido anoche por el Ministerio de Hacienda de la Provincia.

Desde el gobierno bonaerense dijeron que la extensión se resolvió porque “una parte de los acreedores de la Provincia ya ha manifestado su aprobación a la propuesta formulada” y que con el resto se encuentra “en desarrollo un diálogo constructivo” porque “comprenden los lineamientos publicados por la Provincia, que permanece plenamente comprometida con el logro de un proceso ordenado y de buena fe”.

“Una deuda insostenible como la actual implica menores recursos inmediatos destinados a educación, salud, infraestructura y otras políticas de reducción de la pobreza y contención de los efectos de la actual crisis desatada por la pandemia del Covid-19. Esto nos obliga a tomar decisiones responsables, que tomen en cuenta la realidad de todos los sectores”, agregaron.

Según la Provincia, “muchos acreedores han advertido que cualquier propuesta que repita lógicas cortoplacistas derivará en resultados destructivos que también los alcanzará”.

Antes de que se anunciara la extensión del plazo, por la mañana, Kicillof brindó una conferencia en la que hizo referencia a la negociación por la deuda.

El gobernador bonaerense indicó que los acreedores deben “tomar nota de la complejidad económica y financiera que hay, y que no es una cuestión de la Argentina”.

Kicillof afirmó ayer además que los fondos de inversión “están en una encrucijada, frente a una propuesta de canje de deuda sostenible y de sentido común, que permitirá a la Argentina poder pagar, y no empezar de nuevo (la renegociación) en dos años”.

Indicó que “la Provincia coordina las tratativas con la Nación para que haya un posicionamiento único”. Y destacó además el respaldo de los distintos sectores políticos bonaerenses, manifestada a través de la solicitada que publicaron ayer todos los intendentes, tanto peronistas como de la oposición y los vecinalistas.

“Los fondos de inversión tienen otra lógica, pero estamos en una situación en la que muchos países están muy complicados por la caída económica y el aumento del desempleo, como se ve en Estados Unidos, donde pasó del 4 al 14% en pocos meses”, aseveró.

 

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