Curritos playeros 2021
Edición Impresa | 24 de Enero de 2021 | 03:39

Por IRENE BIANCHI
irenebeatrizbianchi@hotmail.com / @irenebianchi
- ¡Volví, chicas! ¿Me extrañaron?
- ¿De dónde volviste? ¿Y ese bronceado? ¿Te diste una biaba de cama solar, o te embadurnaste con “Tan in a Minute”?
- ¡Uy! ¡Qué antigüedad, Elsi! No existe más ese menjunje.
- ¿Y dónde estuviste, entonces?
- Me fui unos días a la costa.
- ¿A la costa? ¿No era que no tenías un mango?
- Cierto. Pero se me ocurrió un currito. ¿Vieron que yo me doy maña con las agujas?
- Ya sé. Pusiste un puesto de pareos para que las minas disimulen los kilitos pandémicos.
- ¡No! Más fácil y económico. De barbijos.
- ¿Barbijos?! ¿Y los vendías en la playa?
- Tal cual. Porque la gente se relaja y se los olvida cuando va al mar. Después les dan ganas de hacer pis, tienen que ir al baño, y ahí se dan cuenta que no los tienen. Y yo, paradita al lado del ñoba, dos por uno, para damas y caballeros, re floridos y veraniegos. No me daban las manos, les juro.
- Pero no subiste ni una foto al facebook, Vilma.
- ¡Ni loca! ¿Para que se enteren los chorros y me desvalijen la casa?
- Yo sí vi fotos tuyas en el face, pero en el fondo de tu casa, regando las plantas, trapeando los pisos, planchando sábanas.
- Para despistar, chicas. Que los cacos piensen que no salís ni a la vereda, ¿se entiende?
- ¡Sos viva, eh! Con esa carita. ¿Quién diría?
- ¿Y no te invitaron a ninguna fiesta clandestina, Vilma?
- ¿Me estás cargando? No doy el target.
- Una amiga mía fue a esa fiesta swinger en Sierra de los Padres.
- ¿Es swinger tu amiga?
- No, pero preparó el catering y se quedó hasta que cayó la cana.
- ¿Ella también creyó que los canas eran strippers?
- ¡Sí! Hasta les indicó donde podían dejar sus bártulos.
- Y, seré curiosa, ¿tenían bártulos grandes?
- ¡Cómo te gusta hacerte los ratones, Lili! Mente roñosa.
- Hablando de esos temas, ¿vieron que Oriana Sabatini dijo que era bi?
- ¿Bi, qué? ¿Bilingüe? ¿Bígama? ¿Binorma?
- Tibio, tibio. Bisexual.
- ¿Y qué? Yo tengo una teoría. Creo que todos y todas lo somos. Y por un mandato cultural, nos encasillamos en un solo género.
- ¿En serio pensás eso?
- ¿Qué tendría de malo? Hay tantas cosas impuestas desde afuera, tantos preconceptos heredados, tantos prejuicios propios y ajenos, que nunca sabremos si nuestras elecciones son libres de verdad. Siempre estamos condicionadas.
- Demasiado profunda para un domingo de enero. Paso.
- Un enero que ya se va, ¿se dieron cuenta? Y el virus, vivito y coleando.
- Si hasta los gorilas se contagiaron.
- ¿Lo decís por mí, Elsi? ¿Tanto se me nota?
- ¡No! Por unos simios californianos. Ni ellos zafaron.
- Chicas, estos barbijos me sobraron. Se los dejo a buen precio.
- ¡Si serás pijotera! Los podrías regalar, ¿no?
- Está bien. Me convencieron. Además, la verdad sea dicha, tienen alguna que otra fallita.
- Vos no das puntada sin hilo. Sos la costurerita que dio el mal paso. ¡Chin, chin!
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE