Flacan: “Nos dimos cuenta que sin arte no se puede vivir”

Entre canciones compuestas hace años y otras creadas “en contexto de pandemia”, Flacan, nombre artístico de Diego De Nigris, artista de Chacabuco radicado en La Plata, lanzó a fines de octubre su primer disco, “Reflejos”, un álbum que presentará esta noche en la sala de 58 entre 5 y 6 “con amigues”.

Un disco que originalmente no era un disco: en diálogo con EL DIA, Flacan cuenta que el plan inicial era ir sacando canciones, hasta que de repente “se me puso en la cabeza la idea de sacar un disco, más que nada para dejarlo asentado: era como un reto, quería tener mi propio disco, sin importar si tiene repercusión, sin importar lo que pasaba. Por una cuestión temporal, de poder escucharlo algunos años más tarde, poder mostrárselo a mis hijos, a mis nietos. Saber que hay algo que rompe con la línea de tiempo en esa vida efímera que vivimos, de velocidad incrementada: tomarme el tiempo para hacer el disco y que quede, que quede ese rato de escucha”.

Así, comenzó a seleccionar algunos de los temas que había compuesto y que “más me gustaban, que tenían alguna historia significativa para mi: todas las canciones tienen una historia detrás, un momento, una emoción, un sentimiento”: así se construyó “Reflejos”, un disco “muy atravesado” por la pandemia, creado en pandemia y con temas elaborados durante el confinamiento, una etapa donde, opina, “la música sirvió como sostén, nos dimos cuenta que sin arte no se puede vivir. Ojalá a partir de eso se le empiece a dar más importancia: muchas veces al arte se lo ve como una actividad, digamos, hippie… pero sacar un disco es un laburo muy duro”.

Con el afán de disfrutar de “lo que costó tanto”, Flacan se junta esta noche con sus amigos a presentar el disco, aunque promete también salirse un poco de lo ya grabado e interpretar algunos temas “con pista, otros en formato más acústico, y también algunas versiones electrónicas para bailar un poco”.

Las versiones acústicas implicarán un regreso a las bases para el artista, que cuenta que la mayoría de los temas nacieron “de la guitarra acústica” en “la intimidad de mi casa, en mi refugio, mi departamento en La Plata”, y que “una vez que están armadas en letra, melodía y armonía, llegó el momento de elegir quién me iba a acompañar” con el objetivo de que el disco se cargara de sonidos: “Quería que suene bien a banda”, explica.

El disco resultante es “Reflejos”, un trabajo con reminiscencias del rock de los 90s y 2000 y algunas incursiones en el universo indie, y “reflejo” de una parte del artista que se pone en juego de modo inconsciente en las letras y en la música misma, “una parte de mí a la que solo tengo acceso a través de la música”.

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BUENOS REFLEJOS

De hecho, desde el inconsciente apareció el nombre de este material discográfico. Flacan encontró que la palabra “reflejos” se repetía una y otra vez, en diferentes canciones compuestas en diferentes momentos, y “pensé que quizás en las letras se reflejaba algo que estaba oculto para mí. Supe que esa repetición nunca podría haberse dado de forma azarosa, sino que tenía algún sentido”.

Estudiante de Psicología, Flacan abrazó inmediatamente el concepto e incluso lo trasladó al arte de tapa, trabajada con Juan R. Lage, que también realizó un video animado donde “la idea era simular una situación proyectiva: siempre en esos tests una de las primeras preguntas es ‘qué ves en esa imagen, qué te hace sentir’, y que queríamos jugar con eso”.