Fastidio vecinal por los autos arrumbados en la comisaría 9ª

Desde hace décadas son parte del entorno urbano. Y si bien se han diseñado distintas estrategias para erradicarlos de las calles, por ahora nadie atina a dar con la solución definitiva. Se trata de los autos arrumbados frente a las sedes policiales, que periódicamente disparan quejas de los vecinos por las incomodidades que generan a quienes viven en cercanías de esas dependencias.

Ahora quienes pusieron el grito en el cielo son vecinos de la comisaría novena, de 5 y 59, quienes describieron el malestar que les generan estos vehículos que bloquean plazas para estacionamiento, juntan basura y, en definitiva, afean esa cuadra.

Una de las frentistas que se comunicó en las últimas horas para alertar sobre esta situación fue Fernanda, quien envió al diario algunas fotos acompañadas por un comentario respecto al pésimo entorno con el que debe convivir: “Ratas, suciedad, hojas, basura, plásticos, escombros. Un verdadero foco de infección”, detalló.

Son, de hecho, decenas de autos vinculados a distintas causas judiciales los que se amontonan en torno a esa dependencia policial, muchos de ellos seriamente destruidos por choques.

“Hace muchos años que vemos como acumulan mugre; cada tanto traen autos nuevos y queda ahí, y se llevan alguno cada muerte de obispo, así que si no se toma alguna medida concreta esto está lejos de solucionarse”, planteó otro frentista de la cuadra en diálogo con este diario.

Como EL DIA ha reflejado en numerosas ocasiones, la ocupación indebida de la vía pública con autos retenidos por la Policía es de esos males que cuesta erradicar en la Región.

A lo largo de los últimos años han sido numerosos los reclamos recibidos por situaciones similares que se han dado oportunamente en las secciónales 4a -diagonal 73 entre 41 y 42-, 2a, situada en 38 entre plaza Olazábal y 8-, Los Hornos y 5a describen panoramas semejantes. A principios de este año EL DIA dio cuenta de una queja similar de vecinos de City Bell, quienes manifestaban su preocupación por el abarrotamiento de autos en la vereda correspondiente a la comisaría 10 de esa localidad.

En las comisarías afirman conocer bien las inquietudes vecinales, y padecer las “molestias operativas” que causan los “purgatorios” de autos, pero que no tienen más recursos mano que “enviar notas y esperar soluciones”.

Semanas atrás la Comuna informó que se avanza con un programa para erradicar rodados abandonados en la vía pública a partir del cual ya se eliminaron más de 12 mil toneladas de chatarra obtenida de vehículos secuestrados o abandonados.