“Jackass por siempre”: dejar el cuerpo por una carcajada

En la superficie, “Jackass” es una pavada: la serie que batió records de audiencia en tiempos de MTV y que luego saltó al cine para sorprender a los espectadores con sus brutales pruebas no es, si se la describe, más que una serie de golpes literalmente bajos, momentos escatológicos y dolor extremo. Y sin embargo, la exposición prolongada a esta serie de dementes que se enfrenta a toros y escorpiones, se lanza al cielo sobre cohetes gigantes y hace estallar baños químicos genera un sentimiento curioso, un creciente afecto hacia esta familia que está dejando la piel, los huesos, el cuerpo, solo para hacernos reír.

Ese es, de hecho, el deseo bajo el cual el productor y líder de los “Jackass”, Johnny Knoxville, volvió a juntar a la banda para una nueva edición de sus travesuras: once años más tarde, llega mañana a los cines “Jackass para siempre”, con el objetivo de que los espectadores, dice Johnny, “se rían y se evadan tras la pandemia”. “La fórmula es que todos nos juntamos y tratamos de hacernos reír unos a otros”, agrega el histórico Steve-O.

Han pasado once años desde “Jackass 3D” y muchas cosas permanecen. La cinta es un sinfín de pruebas descabelladas en la que los actores ponen a prueba su resistencia, la amistad que se profesan y su capacidad para aguantar durante los 96 minutos que dura esta producción que continúan como tradiciones como una dosis de golpes imprevistos en los genitales, competiciones de salto desnudo contra cactus y aclamados e irreverentes concursos escatológicos. Sigue allí el icónico eslogan, “no lo intenten en casa”, el surrealista sentido del humor y las bromas pesadas que sobrepasan todos los límites de la cordura regresa; siguen allí algunos históricos como Knoxville, Steve-O, Chris Pontius, Dave England y Wee Man.

A este conjunto de avejentados hombres extremos se le suma una nueva camada de aspirantes porque, claro: han pasado once años “y mi pelo no volverá a ser oscuro, ya es gris…”, avisa Knoxville, “El Capitán”, como lo llaman sus compañeros de equipo. Pero “la edad no nos ha pesado”, dice Johnny, aunque Steve-O tenía sus dudas. Estaba seguro de que la tercera película, filmada en 2010, sería la última. De hecho, con cada película estuvo seguro de que sería la última. Así que no esperaba que Knoxville propusiera una cuarta: habían pasado 10 años y ahora todos tenían entre 40 y 50 años. Le preocupaba un poco que pudiera ser “extraño” para la audiencia verlos lastimarse como solían. Pero Knoxville estaba convencido de que a medida que envejecían, más chistoso era. Y Steve-O terminó dándole la razón: “Una vez que nos reunimos, la química evidentemente estaba allí. Era como si nunca hubiéramos dejado de filmar”, cuenta. “Estábamos tan locos como siempre. Lo que aprendimos es que nos pueden noquear más fácil y nuestros huesos también se rompen mucho más fácilmente”.

EL COSTO

El eterno retorno es ya una tradición para los “Jackass”. Cuando terminó la primera temporada de Jackass, Steve-O y los muchachos estaban en la fiesta de despedida en un bar y decidieron que no querían que acabara. Inventaron un juego llamado “No me voy” en el que nadie podía salir del bar sobre sus propios pies. No se permitían golpes, pero iban a hacer todo lo posible para resistirse: hacerse un peso muerto, aferrarse a los muebles... Se volvió una tradición y una especie de símbolo de toda su carrera improbable, en la que aunque pasa el tiempo y la televisión de sketches y bloopers parece haber quedado en el pasado, ellos no se van.

Y el gesto es tanto más heroico si se tiene en cuenta el impacto real de poner el cuerpo al límite para despertar una morbosa sonrisa en la audiencia: la grabación de la película pudo costarle muy cara a Knoxville, por ejemplo, después de que un toro lo embistiera y sufriera una pequeña hemorragia cerebral. Y es solo una vez más en la que el equipo extremo ha enfrentado la muerte.

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“Una vez que nos reunimos, la química evidentemente estaba allí. Estábamos tan locos como siempre. Pero nos pueden noquear más fácil”

Steve-O

Además de golpes y fracturas, las secuelas han dejado huella más permanente: Knoxville, por ejemplo, debe orinar a través de un cáteter que le conecta el pene con la vejiga, tras realizar un truco en el que literalmente se rompió el miembro; en el cuerpo de Steve-O, en tanto, no quedan demasiados huesos sanos.

VIVEN

Es una sorpresa tanto para él como para cualquiera que casi 30 años después de hacer esa proclamación salvaje no solo esté vivo y “todavía se salga con la suya”, sino que esté realmente prosperando y ascendiendo en el mundo, teniendo en cuenta que caminó sobre la cuerda floja sobre un foso de caimanes con carne cruda en su ropa interior, inhaló líneas de wasabi y se clavó un anzuelo en la mejilla ante la cámara.

Como varios del equipo, además, tuvo que superar una cruel adicción a las sustancias (que se llevó, por ejemplo, a Ryan Dunn, uno de los históricos de la serie): Steve-O lleva 12 años sobrio con una exitosa carrera como comediante de stand-up, un podcast, un perro, una prometida, un libro en camino sobre las enseñanzas de la vida que se llama... “Un fuerte golpe en las bolas”. Una carrera que nadie imaginaba cuando abandonó la universidad en 1993 y le dijo a todos que su plan era llegar a ser un doble de acción famoso con la ayuda de su cámara de video casera.

El comediante recuerda que la gente sintió lástima por él. Para ser justos, no estaba seguro de que su plan funcionaría en lo más mínimo; sólo quería acumular suficientes imágenes locas para dejar una especie de legado. Lo lograría en “Jackass”, el estridente programa de MTV comenzó en el 2000 y dio origen a una franquicia de series y películas: dentro de ese grupo, Steve-O logró destacarse como uno de los más locos.

Lo cierto es que así, a los golpes, se forman esas familias eternas que son los amigos, los camaradas: y por eso, quizás, “Jackass” nunca se termina de ir. Knoxville ha dicho que esta es la última película por la que arriesgará su vida, pero Steve-O señaló que esta es en realidad la primera vez que no dice que la franquicia ha terminado.

“Dejó la puerta abierta a que hubiera otra película de Jackass. Quién sabe, tal vez ese fue el plan todo el tiempo al reclutar estas caras más jóvenes y frescas como nuevos miembros del elenco”, dijo riendo. “Por lo que sé, esto es solo un ejercicio para reclutar a nuestros reemplazos”.