La UOM alerta en Mar del Plata por baja producción en la industria metalúrgica

La industria metalúrgica en Mar del Plata atraviesa un período de baja producción e incertidumbre, según advirtió la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) local. El secretario general, José Luis Rocha, señaló que algunas empresas logran mantener un nivel aceptable de actividad, mientras que la mayoría enfrenta dificultades que se proyectan hacia el resto del año.

“Hay algunas empresas que están trabajando bien, pero también encontramos muchas otras, sobre todo las que se dedican a la línea blanca, que claramente no están trabajando al 100% de su capacidad de producción. Vemos con preocupación que la situación en general no es buena”, indicó Rocha en diálogo con LA CAPITAL.

El dirigente aclaró que la situación no es homogénea: “Se está trabajando bien en algunas firmas”, aunque también se registraron “retiros voluntarios en algunas empresas y otras que dejan de contar con algunos trabajadores”. Si bien la mayoría logra reinsertarse en el mercado laboral, advirtió que “eso no significa que el panorama sea alentador”.

Sobre dos compañías de referencia en la ciudad, Coppens y Eskabe, remarcó que “están dentro de las que no están trabajando a toda su capacidad”, al igual que “muchos talleres donde se nota la caída”. Actualmente, en Mar del Plata se contabilizan alrededor de 300 empresas y talleres metalúrgicos en funcionamiento.

Rocha explicó que la “temporada alta de la línea blanca” arranca en enero, por lo que el sector aún está lejos de su pico de producción. En contraste, señaló que en el Parque Industrial, donde funcionan unas 20 firmas vinculadas a la metalurgia y la construcción, “se está trabajando bien”, sobre todo en aquellas relacionadas a la energía, como Qm Equipment S.A., ligada a Vaca Muerta.

El titular de la UOM advirtió: “Vemos que algunas empresas están trabajando bien. Sin embargo, la situación en general de la industria metalúrgica no es buena. Y tampoco hay perspectivas de que a corto o mediano plazo la situación vaya a mejorar. Si el gobierno no cambia el rumbo, esto se va a profundizar”. En ese sentido, responsabilizó al contexto económico y a las políticas de apertura de importaciones: “Cada chapa o cada heladera que se trae de afuera representa un puesto de trabajo menos que se genera en el país”.

El panorama local coincide con el informe nacional de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), que registró en agosto una caída de la actividad del 6,1% interanual y del 2,3% respecto a julio. La producción se ubicó un 17% por debajo de sus máximos históricos, con un crecimiento acumulado de apenas 1,6% en 2025. Además, el sector operó al 44,8% de su capacidad instalada, similar al nivel de los primeros meses de la pandemia, y el 74,4% de los empresarios prevé estancamiento o retroceso en los próximos meses.

La histórica firma Bonano, líder en transporte frigorífico, también enfrenta dificultades. Su titular, Daniel Bonano, expresó: “Ser industrial en Argentina es muy difícil. Es lo único que sabemos hacer, pero dependemos totalmente de las decisiones de los gobiernos”. En tono gráfico, agregó: “Lo resumo muy fácil: tengo que tomar pastillas para la presión”.

El último informe de Adimra subrayó que el 90,5% de las empresas no prevé ampliar su plantilla e incluso anticipa recortes. El empleo sectorial cayó 2,9% en comparación interanual y 0,5% respecto de julio. Para el presidente de Adimra, Elio Del Re, “la industria nacional atraviesa niveles productivos muy bajos, que ni siquiera alcanzan a revertir la profunda caída de 2024”.