No me llevo bien con mis compañeros de trabajo

Edición Impresa

Diego, Los Hornos

En la oficina somos ocho personas. Debería ser fácil convivir, pero a mí me resulta imposible. Siento que hablo un idioma distinto: cuando propongo algo, nadie me escucha; cuando me equivoco, lo remarcan enseguida.

Cuando comemos, se organizan entre ellos y yo quedo aparte. No sé si es que no caigo bien, si tengo algo en mi forma de ser que los incomoda, o si simplemente no encajo. El problema es que paso más tiempo con ellos que con mi familia y, aunque cumplo mis tareas, la sensación de estar aislado me drena.

Me digo que no importa, que el trabajo es solo eso, trabajo. Pero el silencio y las risas de las que no formo parte se sienten como un recordatorio de que estoy afuera. Me da vergüenza admitirlo, pero me angustia entrar cada mañana y preguntarme si será distinto. Fantaseo con renunciar, aunque sé que no es una opción real. Me gustaría aprender a llevar la situación de otra manera.

 

correo de lectores

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE