Stolbizer arañó el 12% de los votos y relegó a De Narváez, que queda cuarto

El Frente Progresista Cívico y Social de Margarita Stolbizer y Ricardo Alfonsín, se quedó ayer con el tercer lugar en las elecciones primarias bonaerenses y relegó al cuarto puesto a un desdibujado Francisco De Narváez.

El acuerdo que sellaron el radicalismo y el FAP al cierre de esta edición llegaba al 11,58% de los votos con poco más del 78% de las mesas escrutadas.

La performance del Frente Progresista generó optimismo en las filas de este armado que a nivel nacional se referencia con Hermes Binner, ya que logró, al menos en estos comicios, concentrar una parte del voto no peronista bonaerense que persiguió a lo largo de la campaña electoral.

Como contrapartida, la Unión por la Libertad y el Trabajo surgido tras el acuerdo entre De Narváez y Hugo Moyano, arañó el 11% de los votos en una elección que estuvo muy por debajo de las expectativas del diputado nacional del peronismo opositor.

La irrupción de Sergio Massa en el escenario bonaerense se transformó en un golpe de gracia para De Narváez, ya que el intendente de Tigre terminó concentrando la mayoría del voto opositor al kirchnerismo.

La campaña basada en el rechazo a la posible re-reelección de Cristina Kirchner corporizada en el “Ella o Vos”, terminó por no seducir a una amplia porción del electorado que, si bien rechazó la candidatura del oficialista Martín Insaurralde, se mostró reacio a aceptar al estilo confrontativo que impulsó De Narváez en la campaña.

En ese escenario, el diputado nacional del peronismo opositor llegaba al 10,76% de los votos, de acuerdo al escrutinio provisorio al cierre de esta edición.

Así, quedaba en una incómoda situación política de cara a octubre, con una elección por delante que lo obligará a replantear la campaña en busca de remontar una empinada cuesta electoral.

“LA GENTE QUIERE UN CAMBIO”

En ese marco, Stolbizer aseguró que los primeros resultados obtenidos en las primarias que consolidan a su partido como tercera fuerza no sólo sirven para proyectarse hacia octubre sino que para tener una buena perspectiva a los comicios presidenciales de 2015. “Para nosotros este es un resultado esperado y esto es mirar no solo para octubre sino hacia 2015”, expresó.

Y agregó: “Para nosotros lo más importante es consolidar nuestro espacio, la cantidad de votos nuestros no son volátiles, no cambian, es decir, que los votantes nuestros no van a tirar hacia otros partidos”.

Al ser consultada sobre qué debe mejorar el Frente Progresista Cívico y Social hacia las elecciones de octubre, Stolbizer afirmó que intentarán ratificar “el rasgo de identidad” de su partido. “Somos la única fuerza política que no ha tenido que ver con los últimos 25 años de la política de en la provincia de Buenos Aires. La gente quiere un cambio y para que haya un cambio tiene que haber cambios de políticos”, resaltó.

Sobre la cantidad de empadronados que no fue a votar, Stolbizer aseguró que ese porcentaje de la población “está enojada” con los políticos y que deben apuntar a ellos para ganar más seguidores. “Hay una Argentina que nos favorece y la otra que no complica, queremos llegar a octubre uniendo a las dos Argentinas”, enfatizó Stolbizer, haciendo hincapié en su slogan de campaña, en el que indicaba que había dos países (Argen y Tina) divididos por ideologías políticas.

Por su parte, el candidato a diputado por el Frente Progresista Cívico y Social Ricardo Alfonsín también expresó su felicidad por afirmarse su partido como la tercera fuerza en las elecciones primarias. “Quiero agradecerle a nuestros militantes y este resultado tiene que ver con el esfuerzo de todos. Quiero decir que se consolida en Argentina un Frente que aspira a trascender en 2013, no solo para afrontar el próximo calendario electoral de octubre”, señaló.

En tanto, el búnker de De Narváez era anoche presa de una mezcla de asombro y desolación por un resultado que no esperaban.

“Tenemos hasta el 27 de octubre para demostrar que somos la verdadera oposición” al Gobierno nacional”, dijo anoche el propio De Narváez.