Se cumplen 15 años del crimen de María Soledad Morales en Catamarca

CATAMARCA.- Los padres de la estudiante catamarqueña María Soledad Morales recordarán hoy a su hija con una misa al cumplirse 15 años de su asesinato, y cuestionaron que no se haya investigado el encubrimiento del crimen "que fue tan grave como el homicidio".

Ada Rizzardo de Morales, madre de la adolescente, detalló que hoy a las 18 se colocará una placa recordatoria en el monolito que recuerda el lugar en donde fue encontrado el cadáver de María Soledad, y a las 20 se oficiará una misa en la Iglesia de Villa Dolores.

La misa contará con la presencia de la monja Martha Pelloni, la religiosa impulsora de las multitudinarias marchas del silencio que reclamaron por el esclarecimiento de este crimen que conmocionó al país y derrocó el gobierno provincial.

"Lo que quedó sin resolverse es el encubrimiento que fue tan grave como el hecho mismo, porque hoy muchas personas que deben estar detenidas cumpliendo condenas, y ahora están en libertad", dijo Ada Morales.

La madre de María Soledad explicó que a su criterio "se han borrado muchísimas pruebas y se han falsificado otras. El caso María Soledad quedó impune e irresuelto".

El cuerpo mutilado y sin vida de la chica, que entonces tenía 17 años, fue encontrado el lunes 10 de setiembre de 1990 en un descampado del complejo deportivo de Villa Parque Daza, a la vera de la ruta nacional 38 y a escasos 6 kilómetros del microcentro capitalino.

La estudiante del Colegio del Carmen y San José había salido de su casa en la tarde del viernes para organizar y participar de un baile estudiantil y nunca regresó.

De acuerdo con la investigación, en el transcurso de esa noche se encontró con un muchacho con el que salía, Luis Raúl Tula, quien fue quien la entregó a los homicidas que la sometieron a una fiesta de alcohol y drogas en la que finalmente la asesinaron.

El caso fue sometido a dos juicios orales, uno de los cuales debió ser suspendido cuando las cámaras de televisión detectaron irregularidades entre los miembros del tribunal en medio de una de las audiencias, y por el escándalo debió renunciar Ramón Saadi a la gobernación catamarqueña.

En el segundo debate oral, la Justicia condenó a Guillermo Luque, hijo del ex diputado nacional justicialista Angel Arturo Luque, y a Tula.

Luque recibió 21 años de prisión por el delito de "violación seguida de muerte agravada por el uso de estupefacientes y con el concurso de dos o más personas", aunque actualmente goza del beneficio de salida laboral diaria y pasa muy pocas horas en prisión.

Tula, quien mantenía una relación amorosa con la víctima, fue condenado como "partícipe secundario" del mismo delito a 9 años de prisión, pero desde abril de 2003 se encuentra en libertad condicional tras cumplir los dos tercios de la condena. Actualmente se encuentra cursando los últimos años de la carrera de abogacía.

Los jueces del tribunal de enjuiciamiento habían dejado probado, a su entender, la participación en el hecho de Hugo "Hueso" Ibáñez y Luis "Loco" Méndez, y consecuentemente ordenó sus detenciones, aunque luego fueron liberados por "falta de méritos".

Los falsos testimonios, encubrimientos, falsedad ideológica de instrumento público, asociación ilícita y otros delitos, que los camaristas habían pedido investigar, nunca fueron resueltos.