El tero, otra opción para prevenir disgustos

Según cuentan algunos avesados hombres de campo, otro animal que serviría y, mucho, para cuestiones vinculadas con la seguridad, es el tero.

Esta ave, de tamaño mediano, con patas delgadas y largas, ojos rojos -al igual que su pico- y, que puede domesticarse, "es un guardián insuperable y hasta de manera excesiva. Siempre está atento. Ante el menor movimiento comienza con sus gritos. En todo caso podríamos suponer que es el encargado de despertar al perro guardián para que actúe ante una situación anormal", destacan aquellos que los han visto en acción.

Por lo general, ante una amenaza concreta, "comenzarán a emitir su inconfundible sonido (teru-teru), atacarán con furia a todo aquello que consideren peligroso y/o realizarán vuelos en picadas y, hasta rasantes, sobre el intruso", lo cual, a entender de las fuentes consultadas, permitiría prevenir más de un disgusto.