Club Universitario llamó a concurso de acreedores

“Lo hacemos para proteger el patrimonio del club porque necesitamos un plazo para renegociar el pago de las deudas", señaló el presidente de la institución de Gonnet, Alberto Darhanpe

A raíz de la delicada situación financiera que atraviesa el Club Universitario de La Plata, sus autoridades presentaron la semana pasada un concurso preventivo de acreedores en el Juzgado Civil y Comercial Nº 2.

“Lo hacemos para proteger el patrimonio del club porque necesitamos un plazo para renegociar el pago de las deudas algo que permitirá reordenarlo y sanearlo”, señaló Alberto Darhanpe, presidente de la institución.

Según se explicó en la presentación judicial, el club no logra cubrir sus gastos operativos mensuales con los recursos que posee y mes a mes aumenta el endeudamiento para atender los gastos corrientes. Uno de los datos que ilustra la situación está dado por su cantidad de socios, hace unos diez años contaba con unos 10.500 y en la actualidad esa cifra se ubica en 3500.

Entre los principales acreedores que están comprometiendo la administración del club está el Fideicomiso del Banco Provincia, cuya deuda se contrajo cuando se adquirió la sede de Punta Lara. En este caso la deuda con los intereses sería superior a los cuatro millones y medio de pesos.

“Si se nos otorga una quita del 50% y un plazo de 5 años para el pago, el compromiso mensual de las cuotas ascendería a 65 mil pesos”, apuntó el presidente del club.

En relación a este tema se informó que la sede más apremiada por una posible ejecución hipotecaria es la de Punta Lara y que antes de llegar a una instancia como esa se optó por realizar el concurso preventivo de acreedores que les dará un lapso de año y medio para debatir el destino del ex Jockey Club.

Daranphé informó que también existe una abultada deuda originada en las cargas sociales. En el club se desempeñan unos 90 empleados a los que se está tratando de regularizar a través de distintas moratorias, aunque no se están realizando los aportes jubilatorios.

La deuda con la AFIP es de unos cinco millones de pesos.

“Se cayó el convenio de pago con la AFIP y sufrimos el permanente embargo de las cuentas. Con algo asi es imposible administrar el club”, señaló Darhanpé.

Además se le debe a la obra social OSPEDYC, aunque se aclaró que los empleados aún conservan la prestación.

El dirigente señaló que la medida judicial se tomó ante la necesidad de obtener un mayor plazo para renegociar el pago de las deudas.

Ante la angustia que la medida judicial le provoca a los socios más caracterizados de la institución, Darhanpé fue categórico: “no existe la posibilidad de que el Club Universitario presente la quiebra, en el peor de los casos se podría llegar a ejecutar la sede de Punta Lara”, señaló.

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