México: polémica por autodefensas contra narcos

MIEMBROS DE LAS AUTODEFENSAS MICHOACANAS, CIVILES QUE SE ARMARON EN 2013 PARA COMBATIR A LOS CABALLEROS TEMPLARIOS

MÉXICO.- Hipólito Mora, uno de los fundadores y líderes de las milicias (llamadas autodefensas) del estado mexicano de Michoacán (oeste del país) celebró ayer la captura de un cabecilla del cártel Los Caballeros Templarios, pero la consideró insuficiente y pidió al gobierno el arresto de los capos de esa organización narcotraficante que combaten.

El gobierno mexicano informó el domingo de la detención de uno de los cabecillas de Los Templarios, Jesús Vázquez Macías (37), alias “El Toro”, en el marco de la captura de 38 personas desde que el lunes de la semana pasada lanzó un operativo militar de refuerzo por el recrudecimiento de la violencia en la subregión de Tierra Caliente, zona de producción y tráfico de drogas.

“El Toro” era el jefe de plaza del municipio de Tepalcatepec e “hizo mucho daño: secuestros, asesinatos, extorsiones”, indicó Mora, quien considera a Vázquez como “alguien importante” dentro del cártel aunque cree que su detención “no es suficiente” para que su movimiento deje las armas, ya que no se trata de un miembro de la alta cúpula.

Mora destacó que aún siguen libres seis líderes Templarios, entre ellos Servando Gómez “La Tuta” o Nazario Moreno “El Chayo”, dado oficialmente por muerto en 2010 aunque lugareños aseguran que está vivo. En tanto, desde el gobierno se anunció que las fuerzas federales ya tomaron el control de la seguridad en 27 municipios y desarmaron a 1.209 policías municipales, a los que las autodefensas acusan de estar “arreglados” con el crimen organizado.

Las autodefensas, civiles que se levantaron en armas en febrero de 2013 contra las extorsiones, secuestros y violencia de Los Templarios, han tomado en los últimos meses una veintena de pueblos, de los que han dicho que no se irán hasta que las autoridades capturen a los principales líderes del cártel. La región de Michoacán vive desde hace casi un año en un clima de tensión por el avance de las autodefensas.

TEMOR DEL GOBIERNO

En tanto, las autoridades federales han advertido sobre el riesgo de que los grupos de autodefensa para enfrentar el narcotráfico dejen atrás sus motivaciones legítimas de protección y se transformen en una organización criminal similar al cártel de las drogas al que hoy desafían.

Alfredo Castillo, nombrado comisionado para Michoacán, aseguró que ese proceso se registró en la década pasada con el cártel de La Familia. Este grupo tomó el control de gran parte del territorio de Michoacán ante la incapacidad oficial para combatir el narcotráfico y, tras divisiones y capturas de algunos de sus líderes, dio paso al surgimiento de Los Caballeros Templarios, los actuales enemigos de las autodefensas. Para Castillo, La Familia habría surgido también como una especie de autodefensa para enfrentar y expulsar a Los Zetas, un grupo criminal que entonces ejercía como brazo armado del cártel del Golfo y que luego se independizó para convertirse en un cártel por sí mismo. Al final, La Familia logró expulsar a Los Zetas de Michoacán.