Los restos de Grondona ya descansan en Avellaneda

El cortejo fúnebre arribó al cementerio de Avellaneda, donde quien fuera el presidente de AFA ya descansa en una bóveda junto a su esposa, Nélida Pariani

El cortejo partió desde el predio de la AFA en Ezeiza hasta el cementerio de Avellaneda

Después de un día y medio de velatorio y acompañados por un numeroso cortejo fúnebre que partió desde el predio de la Asociación del Fútbol Argentino, en Ezeiza, los restos de Julio Humberto Grondona, quien falleció el miércoles a los 82 años, llegaron al cementerio municipal de Avellaneda, donde el titular de la AFA ya descansa en una bóveda junto a su esposa, Nélida Pariani.

Encabezado por dos autobombas del cuartel de Bomberos de Sarandí, cargadas con numerosas ofrendas florales, y escoltado por la Escuadra Albiceleste de la policía de la provincia de Buenos Aires, con sus uniformes de duelo, el cortejo partió a las 11.30, para iniciar el camino. Detrás del rodado que llevaba el féretro, salieron más de un centenar de vehículos, que durante 15 minutos estuvieron atravesando el portón del predio. La caravana tomó por Autopista Ricchieri, para luego enlazar con Autopista Dellepiane, Autopista 25 de Mayo y Autopista Buenos Aires-La Plata.

A la altura del kilómetro 9, en Sarandí, el cortejo descendió de la autopista para pasar por detrás del estadio de Arsenal, el club que Grondona fundó en 1957. Una gran cantidad de hinchas del Arse, vecinos y trabajadores de distintas fábricas aplaudieron ante el paso del féretro. Finalmente, el vehículo que trasladaba los restos de Grondona ingresó a las 12.40 por la puerta lateral del cementerio municipal, en cuyas adyacencias también había hinchas con banderas y camisetas celestes y rojas, junto a un fuerte despliegue de policías y periodistas. Dentro del cementerio se encontraban, entre otros, el entrenador del seleccionado, Alejandro Sabella, el director de Selecciones Nacionales, Carlos Bilardo y numerosos integrantes del Comité Ejecutivo de la AFA

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