Siguen la pista de los cómplices que actuaron con la “viuda negra”

Un de ellos habría sido captado por una cámara de seguridad. Se investiga si está relacionado con el mundo de la droga

La noche, los boliches, las drogas. Esta secuencia, con innegable vinculación, podría constituir la trama oculta detrás del caso de la joven platense conocida como “la viuda negra”.

Al menos así lo habría declarado la propia Sofía Dávila (21), quien, ante las autoridades de la comisaría de Tigre donde quedó detenida, “buscó justificarse al decir que actuó agobiada por las deudas que supuestamente tenía con los dealers que le proveían droga”, expresó una fuente policial.

Por estas horas, la investigación avanzó con una pista firme, ya que se habrían podido recabar datos de sus supuestos cómplices.

Los voceros expresaron que al menos uno de ellos habría sido filmado por una cámara de seguridad en Caballito, cuando junto a otra mujer y otro hombre asaltó a una pareja.

Los informantes dijeron que utilizaron otro ardid: la mujer se coló en el edificio y luego abrió la puerta para que pudieran desvalijar un departamento.

En las imágenes se ve a los tres saliendo con valijas y distintos artículos de electrónica.

En tanto, sobre el ataque de la “viuda negra”, trascendió que estaría identificado el coche que utilizaron para cargar el botín que se llevaron de la casa de la víctima: se trataría de un Clio, radicado en Córdoba.

Ante esa situación, son inminentes una serie de procedimientos en busca de la captura de los prófugos.

EL ULTIMO ATAQUE

Los investigadores lograron reconstruir que Sofía y Diego, su última víctima, se encontraron por primera vez hace 15 días en Palermo, luego de conocerse por Facebook e intercambiar datos y fotografías.

Después del encuentro inicial, ella tomó la iniciativa y le propuso ir a comer.

El lunes pasado, estuvieron en un restaurante de comida oriental. En ningún momento la joven dejó de enviarles datos y coordenadas a sus cómplices por mensaje de texto. Al parecer, quería que ellos siguieran de cerca sus movimientos para entrar en acción en el instante indicado.

En su cartera llevaba un blister con un ansiólitco que, dependiendo de la dosis, puede surtir efecto en cuestión de minutos.

Diego llevó a Sofía hasta su departamento de la calle Sáenz Peña, de Tigre. Eran las 2 de la madrugada.

La joven preparó dos fernets con cola. Luego le propuso que se bañara. Le dijo que lo esperaría en la habitación, con otro trago, al que le puso el poderoso medicamento.

El joven lo tomó y cayó en la trampa.

Los delincuentes aparecieron a las pocas horas y le sacaron de todo. Sofía ya no estaba.

Después llegó el momento de la denuncia de un supuesto rapto, que la joven no pudo sostener, hasta que reconoció todo y terminó presa.

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