Kicillof y Larreta analizan el nuevo formato de la cuarentena

Edición Impresa

El gobernador Axel Kicillof y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, mantuvieron ayer un contacto para analizar la situación epidemiológica del coronavuris en el Área Metropolitana (AMBA) en un contexto de crecimiento de los casos durante la última semana.

El Gobierno porteño consideró que antes de tomar alguna determinación respecto de la cuarentena, se deberá analizar la evolución de la curva de casos de COVID-19 y “hacer los cálculos para ver cómo están los contagios y la letalidad del virus”.

En el caso de la administración bonaerense, es más proclive a endurecer la cuarentena, aunque por estas horas se analizan otras variantes que apuntan a restringir la circulación para evitar que se profundice la propagación del virus.

En el caso de la Provincia, ayer se registraron 849 casos, casi 100 más de los que se habían contabilizado el viernes. El guarismo marca una aceleración de los contagios que se verificó durante casi toda la última semana.

Frente a ese escenario -en todo el país se registraron 1.531 casos-, Kicillof y Larreta, en contacto con el gobierno nacional, comenzaron a analizar algunas alternativas.

Una de las primeras opciones pasa por endurecer la cuarentena y volver a fase 1, con una fuerte restricción de actividades comerciales y de circulación.

De hecho, el viceministro de Salud, Nicolás Kreplak, advirtió que “volver para atrás es una de las posibilidades más fuertes en este contexto”..

“Comienza el peor momento de la pandemia. Pero necesitamos no bajar la guardia y seguir cuidándonos como el primer día”, acotó.

Pero no es la única alternativa en danza. También se habla de la posibilidad de profundizar los controles para restringir al máximo la circulación de gente.

En la Provincia preocupa un dato. Tienen detectado que mientras el 3 de junio 1.378.900 personas se trasladaron entre los dos territorios, ese número trepó a 1.503.000 una semana después.

Por eso uno de los planteos en danza es profundizar esos controles para que sólo circulen quienes desarrollan actividades esenciales.

La idea sería que los municipios retomen con fuerza los operativos que en varios casos se fueron haciendo más espaciados con el correr de la cuarentena. También se piensa en más presencia policial y que ese sistema articule con un filtro más exigente de parte de Nación en el uso del transporte público entre ambas jurisdicciones.

Esta última posibilidad reconoce una cuestión: que la larga cuarentena ha impulsado a la gente a salir a la calle.

De cualquier forma ambas alternativas están en debate y subirán o bajarán sus acciones en función de la evolución de los contagios.

Una decisión en ese sentido podría adoptarse incluso antes del 28 de este mes, plazo que fijó la Nación para la extensión de la nueva etapa de la cuarentena.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE