
Pases, portazos, enojos y bloques nuevos tras el cierre de las alianzas
Pases, portazos, enojos y bloques nuevos tras el cierre de las alianzas
Prevén tormentas para la semana próxima, tras una “primaverita”
“¿Qué te puedo cobrar?”: la guía de costos de los apuros domésticos
A solo $9.990 | Pedí "El Caballo Coco", un libro con sonido y para pintar
Especialistas objetan la disolución de un fondo contra incendios
Este sábado, 20% de descuento en El Nene pagando con Modo: las ofertas para este fin de semana
Más de US$500 millones: es lo que deberán devolver Cristina y otros condenados
Unificaron las penas y al final Lázaro Báez tendrá que cumplir un total de 15 años de prisión
La CGT vino a La Plata y le pidió a Kicillof lugares en las listas
Buenos Aires sería la más beneficiada con el impuesto a los combustibles
El arancel del 50% de Trump para Brasil sacude el comercio nacional
“Fuerzan la interpretación para mantenerme ligado al proceso”
Actividades: festival de danzas, fiesta del vino, clases de folklore y taekwondo
La Zona Norte, bajo asedio: radiografía del robo a la hija de un exjuez
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Una campaña lanzada por mujeres propone saturar las redes sociales con fotos y videos de panzas a fin de contrarrestar el mandato social de que es necesario llegar flacas al verano para poder lucirse en malla
En respuesta a la campaña Más de un millar de mujeres ya compartieron fotos y videos de sus panzas / Télam
La iniciativa “Mujeres que no fueron tapa” lanzó la campaña #Hermana soltá la panza, una convocotoria que invita a saturar las redes sociales con fotos y videos de panzas de mujeres reales fin de contrarrestar el mandato social de que es necesario llegar flacas y esculturales al verano parapoder lucirse en malla.
En respuesta a esta convocatoria, más de 1.100 mujeres de todas las edades ya mandaron fotos y videos de sus panzas -algunas de cuerpo entero, otras recortadas- junto con los relatos de experiencias personales que dan cuenta de lo opresivo que se torna por momentos la exigencia de “meter la panza” que muchas de ellas vienen escuchando desde la infancia.
“`Soltar la panza` apela a soltar la incomodidad de estar apretada y los discursos de odio”
“Es la primera vez que me doy cuenta, a mis 38 años, que mi panza es normal, que es parecida a la mayoría de las panzas. Es increíble cómo nos venden imágenes de cuerpo super minoritarios como si eso fuese lo normal o lo más común. ¡Qué loco hacer ese click y qué necesarios estos espacios para hacerlo!”, dice uno de las tantas respuestas que disparó esta campaña y que pueden leerse en la cuenta de Instagram de Mujeres que no fueron tapa.
“Era ‘chata’ antes de la pandemia, que me agarró pisando los 30, iniciando un tratamiento por trastorno de ansiedad y sufriendo violencia laboral. En el medio falleció una de las personas más importantes de mi vida y hubo/ hay días (muchos) en los que me costó/cuesta levantarme. Aun así no me perdono haber ‘engordado’ y no verme como antes”, dice otros de los testimonios.
LE PUEDE INTERESAR
Problemas para hablar, procesar y recordar
“A mí me lo dijo la pediatra a los 4 años, que para que no se me fuera a marcar la panza (meterla) era algo que tenía que acostumbrarme de chica”, aportó otra de las seguidoras de la cuenta.
En las historias compartidas puede observarse toda una serie de panzas en primer plano: algunas con estrías, otras con cicatrices, algunas más prominentes incluso que el busto, otras que apenas sobresalen de los pantalones o polleras. Y todas flácidas, como la tienen la mayoría de las mujeres.
“El hashtag lo venimos usando desde hace cuatro años cuando llega esta época, pero este año lanzamos la campaña porque me pareció que todo estaba mucho más opresivo en relación a los cuerpos”, contó la artista visual, Lala Pasquinelli, referente de Mujeres que no fueron tapa.
“Cuando hablamos del modelado de los cuerpos no es que estamos hablando exclusivamente de la panza, hablamos de todo lo que implica exigirnos esto de no tener panza” que en el fondo lo que plantea es “que si el cuerpo tiene la forma que tiene, es un cuerpo inadmisible”, explicó la activista.
“Las mujeres cuentan cómo desde muy pequeñas les decían que había que meter la panza con todo lo que implica esta restricción. Todas hemos sido educadas esto de no decir, no soltar, no expandirte, no ocupar el lugar”, dijo.
Y lejos de alivianarse, esta exigencia -según Pasquinelli- va en aumento.
“Si una va viendo las publicidades y las imágenes de los influencers, una nota que el fenómeno se viene exacerbando porque ya no es sólo la panza chata sino que ahora lo que se exige es tener las costillas marcadas y una cavidad donde estaba la panza, que no está más”, comentó la impulsora de la campaña.
A su entender, “este modelo de nuestros cuerpos cada vez más pequeños, descarnados, desvitalizados, es una invitación a la desaparición, a esto de no ocupar espacios literal ni simbólicamente”.
Por otro lado, las costillas sobresaliendo “también hablan de desvitalización, de no comer, de no alimentarse, de no nutrirse”, con todo lo que esto implica para aquellas personas con desórdenes alimentarios o en riesgo de tenerlos, dijo Pasquinelli.
En efecto, como señalan desde la Asociación para la Prevención y Ayuda de los Desórdenes de la Alimentación y Vida Sana (APADAVIS), el afan de delgadez y las llamadas “dietas del verano” que prometen resultados a corto plazo constituyen cada año para miles de adolescentes la principal puerta de entrada a conductas que pueden conducir a trastornos alimentarios serios, como la bulimia y la anorexia, las que luego requieren largos tratamientos para recuperarse.
“Es la primera vez que veo mujeres con cuerpos que me hacen sentir que el mío está bien”
“Por supuesto que esto no es una crítica” a esas mujeres que encarnan el modelo hegemónico de corporalidad, sino al modelo mismo que “nos exige a todos los cuerpos no tener tejido y enseñar los huesos a pesar de que eso implica exponernos al hambre, a la desvitalización, a la extenuación física, a las cirugías”, aclaró la activista social.
“Es un discurso que nos vuelve a cosificar, a ponernos en el lugar de objetos y a decir que nuestro lugar en el mundo es ser agradable a la vista y que ser agradable es eso que nos muestra ahí”, dijo.
En este contexto la consigna de “soltar la panza” implica todo lo contrario y apela a “soltar la incomodidad de estar apretada, soltar los discursos de odios sobre nuestros cuerpos y, reconocernos como somos ocupando el espacio material que ocupamos”.
“Viendo todas las imágenes te das cuenta de muchas cosas, que te das cuenta que no estás acostumbrada a ver los cuerpos de mujeres como las que conocés en los medios o las publicidades, que tenemos la referencia capturada por un solo cuerpo, con el que todos tenemos que encajar para ser buenas mujeres, queridas, felices o que disfrutan”.
La propuesta va en consonancia con iniciativas del activismo gordo y de los cuerpos diversos, y Pasquinelli reconoce en todas estas campañas “una respuesta a esta opresión”
“Todo lo que hay que hacer para no tener panza es una completamente antinatural -tratamientos, dietas, cirugías- mientras que lo que nos sucede a todas naturalmente, que es tener panza, está vedado”, dijo.
En cuanto a cómo acoplarse a la consigna de “Hermana, soltá la panza”, la referente de la iniciativa señaló que hay libertad de acción.
“La propuesta es que todas empecemos a soltar, como cada una pueda: las que se animen, que la muestren, ya sea en primer plano o cuerpo entero, como quieran. Lo importante es que empecemos a ver que nuestros cuerpos existen, que hay otras mujeres con cuerpos como el mío, y poner a jugar estos discursos contrahegemónicos”, agregó.
En ese sentido, contó que “muchas mandaron mensajes diciendo que ‘es la primera vez que veo mujeres con cuerpos como el mío, que me hacen sentir que mi cuerpo está bien’”.
ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES
HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS
Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales
¿Ya tiene suscripción? Ingresar
Full Promocional mensual
$670/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $6280
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Acceso a la versión PDF
Beneficios Club El Día
Básico Promocional mensual
$515/mes
*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $4065
Acceso ilimitado a www.eldia.com
Diario El Día de La Plata, fundado el 2 de Marzo de 1884.
© 2025 El Día SA - Todos los derechos reservados.
Registro DNDA Nº RL-2024-69526764-APN-DNDA#MJ Propietario El Día SAICYF. Edición Nro. 6986 Director: Raúl Kraiselburd. Diag. 80 Nro. 815 - La Plata - Pcia. de Bs. As.
Bienvenido
Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
Bienvenido
Estimado lector, con sólo registrarse tendrá acceso a 80 artículos por mes en forma gratuita. Para más información haga clic aquí
DATOS PERSONALES
Ante cualquier inconveniente durante el inicio de sesión, por favor escribanos a sistemas@eldia.com
¿Querés recibir notificaciones de alertas?
Para comentar suscribite haciendo click aquí