Argentina superó la barrera de las 100.000 muertes por coronavirus
Edición Impresa | 15 de Julio de 2021 | 02:27

La cifra más sensible de la pandemia, la que marca el número de muertos, cruzó ayer la barrera de los 100.000 en el país, después de que se registraran 614 nuevos decesos que elevaron el total de fallecidos a 100.250.
Ese número se alcanzó 494 días después de que se reportara la primera muerte por coronavirus en la Argentina, el 7 de marzo de 2020.
Con una tasa de 2.239 muertes cada millón de habitantes, el país se ubica en la lista de las once naciones que superaron esa cifra de decesos por esta enfermedad singularmente cruel, según la plataforma Our World in Data.
El ranking, claro está, computa a los países que cuentan con estadísticas que son confiables o que pueden ser verificadas por organizaciones independientes. Y deja de lado a aquellos cuyos datos sobre el avance de la pandemia son inverosímiles o, simplemente, no brindan referencias sobre contagios y muertes. Con lo cual, la ubicación de nuestro país y otros contemplados en ese ranking, podría variar sustancialmente si se contabilizase a la totalidad de los estados.
El coronavirus, por estos días, plantea nuevas amenazas a través de variantes como la Delta, que obliga a numerosas naciones del mundo a adoptar nuevas restricciones, aunque todavía no tiene circulación en nuestro país.
Cambios
Si bien más de la mitad de las muertes que se produjeron en el país a causa de la enfermedad correspondieron a personas de más de 70 años, la vacunación de los mayores y la irrupción de la segunda ola cambió significativamente esa tendencia y produjo que se redujera la edad de muertos e internados.
Nuestro país, que registra este escenario pese a haber realizado aislamientos severos, busca en la actualidad mejorar su situación sanitaria mediante la aceleración del plan de vacunación en medio de una meseta consolidada de contagios.
Con los 19.697 infectados que fueron reportados ayer, el país ya suma 4.702.657 afectados por la enfermedad, mientras que el promedio de muertes diarias reportadas en las últimas dos semanas superan las 300.
Algunos especialistas las atribuyen al pico de casos que se produjo hace unos dos meses, en el marco de la segunda ola, y al hecho de que una mayor proporción de pacientes de entre 40 y 60 años -que todavía no estaban vacunados entonces- ocuparon las unidades de cuidados intensivos.
Estos enfermos, que tienen mayor fortaleza física, pasan más tiempo en terapia peleando contra la enfermedad y mientras más se extiende su estadía aumenta la posibilidad de que sufran complicaciones y fallezcan, según advierten expertos. Para varios especialistas consultados, la clave para frenar los decesos está en acelerar la vacunación.
Las muertes por coronavirus en el país se iniciaron apenas cuatro días después de diagnosticado el primer caso, el 3 de marzo de 2020. Guillermo Abel Gómez, un hombre que había viajado a Francia, presentó síntomas y pocos días después falleció en un hospital de la Ciudad de Buenos Aires.
Los mil muertos
El 21 de junio de 2020, Argentina la cifra de muertos superó los 1.000. Un año y casi un mes después la cantidad de fallecidos es cien veces mayor.
En menos de un mes, a mediados de julio de 2020, el número de fallecidos se había más que duplicado: ya eran 2.500.
En abril, la cifra de fallecidos trepó a 58.542. En un año se pasó de 6 muertes por día a 267 cada 24 horas.
El 22 de junio se registraron 792 muertos, lo que representó el récord todavía vigente de muertos diarios. Con ese número, se superaron los 90 mil fallecidos. Durante la primera ola, el pico de fallecimientos se había registrado el 9 de octubre, con 407 muertos.
Grandes y chicos
Entre los fallecidos, los más añosos fueron cuatro mujeres de 106 años, mientras que los más jóvenes resultaron más de medio centenar de bebés de menos de un año.
Algunas de estas muertes conmovieron especialmente a la sociedad por tratarse de personalidades reconocidas de la cultura, de los medios de comunicación o del deporte.
Los casos de Pino Solanas, Hugo Arana, Mauro Viale, Héctor Pochola Silva, Leopoldo Jacinto Luque, Martillo Roldán o Agustín Alezzo se contaron entre ellos.
Pero a esas historias se sumaron otras igualmente conmovedoras que tuvieron como protagonistas a personas comunes.
Entre ellas se contó la de Ramona Medina, una vecina de la porteña Villa 31 que cuando el coronavirus comenzó a extenderse en ese barrio denunció la falta de agua que impedía a los habitantes del lugar mantener las medidas de higiene. Ramona, que era insulino dependiente fue internada apenas una semana después y murió el 17 de mayo de 2020.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE