Aglomeraciones, una postal que se multiplica en las escuelas

Los horarios escalonados de ingreso y salidas escolares es una propuesta para evitar aglomeraciones en las puertas de las escuelas. Con el regreso a la presencialidad plena esa medida se fue diluyendo en distintos establecimientos educativos de la Ciudad, tanto públicos como privados.

Por ejemplo, en la zona del colegio Sagrado Corazón, en 57 entre 8 y 9, es habitual observar escenas de aglomeraciones a la entrada y salida escolar.

Según se indicó, la entrada escalonada en Sagrado Corazón con 30 minutos de diferencia entre la entrada de distintos cursos hace imposible la circulación vehicular y además hay 20 minutos, cómo mínimo, con gente agolpada en la puerta,

Otra situación similar se observa a pocos metros, en la zona del ex Normal 3, de 58 y 8, donde cerca de las 8 de la mañana es una postal de la prepandemia, con los padres agolpados en el ingreso de los alumnos, situación que se repite al mediodía.

También en 55 entre 10 y 11, donde está la Primaria y el Jardín de Infantes de la Escuela Italiana, salen los chicos con poco tiempo de espacio entre cada curso.

En 55 entre 12 y 13 se registra una situación similar, con numerosos padres agolpados en los horarios de ingreso y salida de los pequeños alumnos.

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En la Escuela 10, de 16 entre 48 y 49 también se observan aglomeraciones de padres y familiares que van a buscar a los chicos a la hora de salida.

Una vecina que habló con este diario indicó que “tendría que haber un operativo preventivo de alguna autoridad municipal o provincial que evite estas situaciones. Parece que para un número cada vez mayor de personas la pandemia ya pasó y no es así. No hay una situación de normalidad que permita estas situaciones. La gente vuelve a jugar con fuego”.

En distintos colegios remarcan que “siguen los horarios escalonados y todas las medidas de cuidado pero la situación está transformando porque cada vez menos se respetan las normas fuera de la escuela y eso termina provocando situaciones no deseadas”.

Incluso, mientras los padres y familiares aguardan en las puertas de los colegios privados y escuelas públicas cada vez se ve menos el uso de barbijos. En algunos casos, observar el distanciamiento social es hablar de una excepción, no de una regla.

El ingreso escalonado, el uso de barbijos, el distanciamiento social, sigue formando parte de las recomendaciones realizadas para evitar la propagación del covid.

El regreso a las aulas con presencialidad plena tras el último receso invernal se dio en el marco del Plan Jurisdiccional, acordado con gremios y el resto de la comunidad educativa .

El Plan Jurisdiccional para el Regreso Seguro a Clases Presenciales establece pautas para la organización institucional de las escuelas para posibilitar el distanciamiento social, la adecuada circulación de aire, la limpieza y desinfección de los establecimientos y la higiene personal.

También, entre las pautas principales también se incluyó la organización de los ingresos y egresos de las escuelas para llevarlos a cabo en horarios escalonados de manera tal que eviten la concentración de personas. Una de las propuestas fue pautar 15 minutos de diferencia entre los horarios de salida y entrada de los grupos de estudiantes.

EN CABA PREPARAN NUEVO PROTOCOLO

Según trascendió ayer, en las últimas semanas, la cantidad de chicos y docentes aislados en las escuelas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) aumentó debido a que ante cualquier síntoma sospechoso, el grado entero cumple la cuarentena indicada hasta tener el diagnóstico preciso sobre la aparición de un caso de covid.

En ese contexto, ayer trascendió que el ministerio de Educación porteño trabajaría en un nuevo protocolo con cambios que flexibilicen la definición de caso sospechoso y que los cursos no deban interrumpir la asistencia ante el primer síntoma. El nuevo esquema evitaría que se aísle toda la burbuja, adelantaron.

En CABA, además, tiene lugar una particularidad: por un lado los casos positivos de covid en las escuelas bajaron en las últimas semanas, pero la cantidad de burbujas o grupos aislados de manera preventiva subió con el objetivo de contener o bien evitar posibles brotes de la variante Delta.