Tendencia: por qué no siempre hay que comprar una notebook nueva

Quien necesite comprar una notebook tiene mucho para elegir porque la oferta es enorme. Pero no solo hay que mirar ordenadores portátiles nuevos, el mercado de notebooks usadas crece y hoy, más que nunca, el consumidor debe saber qué es lo que necesita.

Las notebooks no solo pertenecen al mundo laboral, sino también desde hace tiempo integran el equipamiento estándar de computación del hogar.

“La tendencia se inclina a notebooks cada vez más delgadas y planas, que ya disponen a menudo de un equipamiento básico muy bueno”, afirma Sven Schulz, del portal especializado “Computer Bild”.

Hace tiempo integran los equipos estándar de computación del hogar

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Sin embargo, para la mayoría de los compradores potenciales, a primera vista apenas se reconoce la calidad de un aparato nuevo. Los numerosos logotipos del embalaje no suelen ser muy informativos.

Es necesario informarse antes de realizar la compra. “Quien quiera comprarse un ordenador portátil nuevo y barato debería primero orientarse con tests comparativos y realizar una selección previa”, aconseja Schulz.

El experto asegura que también tiene sentido, si es posible, examinar previamente el aparato en una tienda. ¿Cómo está fabricado?

Los fabricantes ahorran, por ejemplo, en la pantalla, dice Schulz, lo que suele notarse en la calidad de la imagen. En muchos portátiles, a menudo no es posible actualizar el ordenador más adelante porque los componentes están soldados permanentemente o el aparato es difícil o imposible de abrir.

LAS NOTEBOOKS CARAS SE UTILIZAN DURANTE MÁS TIEMPO

En estos casos, los portátiles de mayor calidad pueden ser la mejor opción. “Si se invierte más dinero, se puede utilizar una notebook más tiempo”, dice Schulz.

“Otra opción es comprar una laptop que se pueda actualizar con más memoria RAM o una SSD más grande”. Por desgracia, lamenta el experto, esto ocurre cada vez menos con los modelos delgados.

Los usuarios que no quieren gastar más de 200 a 400 euros (215 a 430 dólares), deberían buscar también dispositivos usados, considera Matthias Wellendorf, de la revista digital “Inside-digital.de”.

“Si el presupuesto para comprar una notebook no es el mayor, en cualquier caso merece la pena mirar los dispositivos usados”, recomienda.

Inspeccionar y probar es siempre una buena idea antes de comprar, dicen los expertos. / Florian Schuh, DPA

Wellendorf afirma que los modelos para el sector de negocios, como los procedentes de contratos de leasing con grandes empresas, representan una gran parte de la oferta.

Los aparatos de segunda mano de este tipo suelen ser ordenadores de alta calidad, correspondientemente bien fabricados y equipados. Quien quiera comprar un ordenador portátil de segunda mano puede y debe, por tanto, buscar equipos de la máxima calidad posible.

Los modelos usados valen la pena, según opina Schulz, cuando el precio de compra está notablemente por debajo de un equipo nuevo comparable.

Un uso prolongado siempre es más sostenible que la compra de un aparato nuevo. Una fuente de este tipo de aparatos son los conocidos mercados online, los portales de reacondicionados o directamente las páginas de los proveedores de reacondicionados.

“Los distribuidores profesionales compran grandes cantidades de portátiles usados y los ofrecen como ‘reacondicionados’ con un año de garantía tras su renovación”, explica Wellendorf.

ALGUNAS OFERTAS DE EQUIPOS REACONDICIONADOS SON MUY CARAS

Wolfgang Pauler, de la revista “Chip”, aconseja sin embargo mirar con lupa las ofertas, también -y sobre todo- en las grandes tiendas de electrónica, que ahora suelen ofrecer productos reacondicionados.

“Según nuestra experiencia, las notebooks usadas de las grandes tiendas rara vez tienen un precio atractivo. A menudo, el hardware es bastante antiguo y no guarda una relación de precios razonable con los productos nuevos”, aclara.

Por ello, la compra de un ordenador portátil nuevo barato vale la pena, en cualquier caso, por la actualidad de muchos componentes. “Los ventiladores nuevos son más silenciosos, el sistema operativo está al día y la pantalla seguro que no tiene arañazos”, dice Wellendorf, quien añade que la batería también es nueva.

Sin embargo, avisa, puede ser que haya que hacer concesiones en el tamaño de la memoria RAM o en el rendimiento del procesador.

“La memoria principal suele ser de solo cuatro gigabytes y, a menudo, se instalan los módulos eMMC más baratos y lentos en lugar de los SSD, que también están soldados de forma permanente”, dice Wellendorf, al nombrar ejemplos típicos de equipos negativos para una nueva computadora portátil barata.

En última instancia, señala, a la hora de definir si un dispositivo nuevo más o menos barato es la mejor opción, en vez de una computadora portátil usada, dependerá mucho de la necesidad.

“Si solo se quiere navegar por Internet y escribir un poco, un ordenador portátil usado puede ser adecuado por unos pocos cientos de euros”, dice Wellendorf.

Sin embargo, si se quiere utilizar programas gráficos complejos o jugar online, solo se debería invertir en una notebook de segunda mano de alta calidad o, en todo caso, optar por un dispositivo nuevo.