Al amparo de la oscuridad, desvalijan un quincho
Edición Impresa | 10 de Septiembre de 2025 | 04:09

Un vecino de 51 años se encontró con una amarga postal esta mañana cuando se dirigía a cumplir con sus obligaciones laborales. Según pudo saber este diario, eran las seis de la mañana cuando, tras salir de su casa, descubrió su automóvil con el parabrisas rajado y el vidrio del conductor estallado.
Inmediatamente se dio cuenta de que el daño al automotor había sido ejecutado para extraer del interior una mochila que contenía ropa de trabajo. El ataque confirmaba un dato perturbador: alguien había irrumpido en su propiedad mientras la ciudad todavía dormía.
Aquel razonamiento lo empujó a realizar un recorrido por su propiedad. Y fue en ese periplo que la sorpresa se transformó en certeza: el alambrado perimetral de la vivienda estaba destejido y abierto.
En el quincho y el garaje faltaban un carro de dos ruedas, una bicicleta, un televisor de 32 pulgadas, un compresor y una herramienta de mano. Los ladrones se habían tomado el tiempo de revolver, de elegir y de abandonar la propiedad con lo que podían cargar, sin que nadie lo notara.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE