Opinan los lectores

“Apagar el fuego“

Jesús Matías Filomeno Ocampo señala: “En el atardecer del 8 de abril pasado, regresando a La Plata, leía en los peajes sobre la Ruta 9 unos cartelitos en hoja A4: “Precaución Humo“. A las pocas horas un accidente múltiple fue el resultado de la imprevisión de los concesionarios y de las autoridades. El incendio de campos en la región de Zárate y en Entre Ríos tardó 25 días, con la ayuda de una lluvia providencial, en ser extinguido, después de quemarse casi setenta mil hectáreas.

“Incomprensible, teniendo a la vista los antecedentes de los grandes incendios en los bosques del Sur, en las sierras de Córdoba, en Tandil, de los 25 bomberos muertos en Puerto Madryn, etc. Estando en agosto de 2003 en Terni, Italia, se originó un incendio en las muy pobladas montañas cercanas como consecuencia del intenso calor y de la sequía. La placidez de la siesta junto al Lago Piediluco fue interrumpida por el ruido de los motores de dos aviones, que en vuelo rasante recogían agua desde el lago y la arrojaban sobre el fuego de la montaña.

“Parecían una calesita gigantesca. En pocas horas el fuego estaba controlado. Al atardecer, la televisión mostraba las brigadas de bomberos que supervisaban la extinción total y resumía la labor de los aviones hidrantes. Es realmente incomprensible que nuestro país no cuente con los recursos imprescindibles para controlar y prevenir este tipo de tragedias. Es realmente incomprensible que se gasten millones en el Tango 01 y que no se compre una flota de aviones hidrantes“.

“Integración“

Mónica Di Giano cita: “Soy mamá de Vicky, de 22 años, que tiene capacidades diferentes. Días pasados decidimos mandarla a natación en compañía de Justina, su acompañante, a un reconocido natatorio que elegimos porque nos aseguraron sobre su experiencia en integración y conocimiento de la discapacidad. Me resulta difícil expresarle la alegría de Vicky cuando comprendió que la llevaban a la pileta.

“Después de lo que debía ser una aventura apasionante para Vicky, la expresión de Justina me hizo comprender de antemano que algo no andaba bien, que algo había empañado su entusiasmo y su envidiable espíritu. En el mismo instante creo que Vicky también comprendió que pese a que se había portado muy bien, no regresaría a ese lugar tan gratificante, no obstante lo mucho que le había costado llegar hasta el agua.

“Luego de hacer una larga cola para la revisación médica, de ducharse y de poner todas sus energías en bajar unas escaleras eternas para acceder a la pileta, la diversión en el agua duró solamente unos minutos. El Coordinador llamó a Justina y le dijo que mi hija no podía seguir en la pileta, que en ese lugar donde jugaban muchos chicos que miraban incrédulos cuando mi hija era “retirada“ de la pileta, no se podía estar pero que le podía recomendar “otras“ piletas. En otras palabras, le dijo que mi hija discapacitada era un estorbo en su natatorio modelo.

“Cuando terminé de consolar a Justina y pude recuperarme y recomponer mi espíritu, me decidí a escribir estas líneas para que ello no vuelva a ocurrir. Quiero simplemente dejar un mensaje: los valores que a diario manejamos y que escuchamos en boca de todo el mundo, como la tan vapuleada “integración“ no se declaman, se ejercen. Y la mejor forma de hacerlo es con el ejemplo“.

En desacuerdo con denuncia de edil de Rauch

Marcelo José Erro expone: “Soy de Rauch y escribo con intenciones de tratar de aclarar que las versiones que circulan de que en esta ciudad hay más cabarets, salas de encuentros, etc., que fábricas, no es real.

“Sólo hay que tomarse el tiempo suficiente para informarse y/o recorrer nuestro hermoso pueblo, que seguramente muchos se van a llevar una gran sorpresa debido a que somos la envidia de pueblos y/o ciudades vecinas por todos los emprendimientos y fábricas existentes, sin contar los talleres de artesanías.

“Propongo, que en vez de armar una sesión extraordinaria en el Concejo Deliberante para tratar los temas de los lugares de encuentro (que en definitiva, a los mismos sólo concurren personas por propia voluntad), tratemos temas tan importantes como el parque industrial, con el fin de apoyar a las empresas existentes y la cantidad de interesados en instalarse en el mismo.

“Lamento que el Dr. Ibargoyen, edil de Rauch, haya perdido su tiempo haciendo la recorrida casa por casa en el período pre-eleccionario, tanto por no poder conseguir los votos que para intendente buscaba, sino que además no supo descubrir el potencial económico que tenemos en nuestro medio, si es que de fábricas y cantidad de gente con pequeños emprendimientos se trata“.

“Retención... a la paciencia“

Guillermo Garbarini dice: “Después de tantos días de “negociaciones“ hay algo que valorar, y es la paciencia que han tenido durante todo este tiempo las entidades agropecuarias. Y no sólo hablo del período de “tregua“ o “post-tregua“, sino de los más de 4 años que llevaban intentando dialogar con el Gobierno sin ninguna respuesta. Y soy testigo: no soy socio de la Sociedad Rural de Junín, pero estuve presente en las últimas 5 Asambleas Anuales que se realizaron y en cada una de ellas se trató el tema de dialogar con el Gobierno y lo difícil que se hacía y año a año, la cosa iba peor, y el vaso se iba llenando.

“Había mucha gente que ya a fines del 2007 había perdido la paciencia. Está claro que no sólo se discute un monto de retención, sino muchas cosas más, que durante más de 4 años fueron llenando un vaso que luego del 11 de marzo rebasó. Una cuestión no menor es el momento en el cual se implantó la polémica medida, que refleja claramente la intención “recaudatoria“ de la misma, ya que, para quien no sabe, durante los meses posteriores a marzo se realiza la cosecha del “yuyo“, como le dicen desde el Gobierno.
“La Presidenta tiene una oportunidad histórica de retractarse a partir de ahí dialogar, porque hay muchas cosas que mejorar y porque si se mejoran el país andaría muchísimo mejor. Pero lamentablemente lo que no se ve, de parte del Gobierno, es la voluntad de decir “me equivoqué“, algo que cualquiera de nosotros hace, ¿o acaso nadie se equivoca?“.

“La inflación, madre de todos los problemas“

Jorge Mario Romero nos dice: “Mientras otros países de la región productores de soja avanzan aprovechando el momento tan especial que vive la economía mundial, equilibradamente, controlando la inflación y exportando cada vez más, aquí se suspenden las ventas al exterior, con un grave deterioro de la credibilidad del país, interna y externa; se convierte en enemigos a los productores con el resultado de que cada vez hay menos oferta, aumenta la desocupación, mientras la inflación crece ‘con prisa y sin pausa’.

“Los servicios todavía deben ajustarse, la demanda por aumento de salarios es incontenible en un país que tendría en este momento todo para despegar de una buena vez. Nuestros vecinos: Brasil consiguió en poco tiempo posisionarse en el mundo como el mayor productor ganadero; y ahora tiene petróleo, gracias a una política continuada por décadas; y también con la soja.

“Uruguay, diez veces menor que Argentina, se da el lujo de comer carne como siempre y aun más, y exportar más que nosotros. Tiene Uruguay muchos menos recursos, pero la gran diferencia es que se maneja, al igual que Brasil y Chile, fomentando la mayor producción, único remedio contra la inflación, que es la mayor carencia de los gobiernos que hemos sabido conseguir“.

“Ladrones sin códigos“

Joaquín Galán expresa: “Siempre ha habido “chorros“, pero los ladrones de antes tenían códigos. Sí, robaban igual, pero respetaban a los niños, viejos y mujeres. Si no tenían plata no pasaba nada, se iban y chau, no como ahora que te dan una paliza y te sacan lo que tenés. Y si no tenés nada hoy te matan y eso antes no pasaba.

“¿Cómo tener esperanza en el género humano cuando uno ve, oye y palpita tanta crueldad y violencia? ¿Cómo no sentir un derrumbe moral si vemos horrores cotidianos de maltrato a ancianos, violaciones, abusos, tiros, golpes y agresiones? ¿qué hicimos para merecer esto? ¿qué pasó?.
“Es una lucha desigual por falta de códigos, pero no ganamos nada quedándonos callados y quienes niegan esta realidad ponen el valor social/familiar por encima del valor del respeto humano. Y la respuesta será simplemente “nada“ y los habituales atropellos a los códigos van en utopía de un pasado cada vez más lejano; pidamos justicia y no venganza.

¨¿Qué pasa por el cerebro de estos malandrines que esperan ocultos al paso de las chicas para golpearlas y violarlas? Sería importante que desde el campo de la dirigencia política se intentara hacer, con madurez y honestidad, un análisis profundo de los sucesos que desgarran a la sociedad, en la cual se va perdiendo todo el respeto por el valor de la vida humana, se violan todos los principios que amparan la seguridad y la dignidad de las personas. Sólo la justicia puede hablar y ojalá la venda de sus ojos no sea la mordaza de su boca“.