Suspenden la habilitación de bares, pubs y boliches

El Concejo Deliberante suspendió por 90 días la localización, instalación, traslado y otros trámites de habilitación de bares, confiterías bailables, pubs y locales de servicios recreativos, pero no la transferencia de esos comercios, según expresaba el proyecto original impulsado por la Intendencia, como paso previo a la discusión de un Código de Nocturnidad que incluiría nuevos requisitos para la habilitación de estos locales.

La prohibición de abrir nuevos locales recreativos fue votada en la última sesión del año del deliberativo platense que, como este diario informó, empezó en el seno de las comisiones legislativas la discusión de un proyecto de "Código de Nocturnidad" por el que se intentará imponer nuevas normas a la actividad del esparcimiento nocturno.

Según el proyecto en discusión -que podría ser aprobado durante el año próximo al mismo tiempo en que caduque la suspensión de habilitaciones aprobada ayer- se legalizaría la realización de bailes en sitios habilitados como bares, restaurantes y pubs de acuerdo con el "uso y costumbre" impuesta por el público en los últimos años.

El Código de Nocturnidad contempla además, entre otras medidas de seguridad para los locales de recreación nocturna que se habiliten en el futuro, la instalación de cámaras de seguridad internas y externas, entre otras normas contenidas en el "Código de Regulación Integral de Espectáculos Públicos, Actividades Recreativas y Nocturnidad".

"La idea es que el nuevo Código sea discutido y mejorado entre todos los actores sociales y los sectores económicos vinculados a la actividad nocturna", había expresado a este diario la presidenta del bloque bruerista, Valeria Amendolara a poco de ser presentado el proyecto para su discusión en las comisiones de labor legislativa del Concejo Deliberante.

Entre otras cuestiones, el código de nocturnidad propone "blanquear" la situación de los bares, pubs y restoranes donde al mismo tiempo en que se brindan servicios gastronómicos se desarrollan recitales y bailes en el marco de una modalidad que tiende a extenderse en la Ciudad. Hace dos años, cabe señalar, la concejal Teresa Razzari -actualmente con licencia por desempeñarse en el Ejecutivo comunal- había sostenido la necesidad de "aggiornar" la norma de boliches para adaptarse a las nuevas tendencias en materia de diversión nocturna. Aquella idea de Razzari chocó contra la negativa del entonces concejal por el Ari y hoy diputado provincial, Oscar Negrelli, que señaló que "si por uso y costumbre a la gente se le ocurre tener sexo en los boliches entonces iremos y les pondremos biombos para que estén más cómodos".

Otro costado polémico del Código que se impulsa es la instalación de videocámaras en el ingreso a los locales pero también en su interior. "La cantidad de cámaras que se exigirán, y si estarán o no conectadas al sistema de monitoreo urbano, se definirá en la reglamentación de la ordenanza, que será responsabilidad del Municipio, y del debate que se desarrolle en las comisiones del Concejo", se indicó.