Aníbal niega problemas de cartel con Capitanich

El flamante secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, sostuvo ayer que no habrá “problemas de cartel” con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aunque ratificó que una de sus responsabilidades será “comunicar la gestión de gobierno” y su colega “tiene que cumplir con sus funciones”.

“¿Cómo voy a tener problemas de cartel? Algunas cosas nos sentaremos para charlar y acordar de la mejor manera. El es el jefe de Gabinete y tiene que cumplir con sus funciones”, indicó Fernández, al ingresar ayer a la mañana a la Casa Rosada.

Consultado respecto de si Capitanich continuará con sus habituales conferencias de prensa en la sede gubernamental, Fernández contestó: “Es un tema que le tiene que preguntar a él, no a mí”.

Advirtió que, con Capitanich, “nos conocemos hace muchos años, somos amigos desde hace muchos años, ¿cómo voy a venir a competir o a meterme en lo que no me tengo que meter?”.

No obstante, el mismo ex senador concedió que fue convocado por “mi forma de comunicar” y para manifestar “las cosas que son importantes para decirse” desde el Gobierno, una actividad que, desde hace un año, formalmente estaba a cargo, casi exclusivamente, de Capitanich.

CANDIDATURA

En tanto, Fernández aseguró que su regreso al Poder Ejecutivo “no tiene nada que ver” con un respaldo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a su precandidatura para las elecciones del año próximo.

“La Presidenta ha buscado un funcionario que tiene determinadas características. Me trae por lo que soy. Supongo que por mi forma de comunicar, porque sigo insistiendo en al gestión de gobierno y en las cosas que son importantes para decirse. Nada tiene que ver con la candidatura”, dijo.

Aníbal Fernández, quien asumió anteanoche en su nuevo rol, remarcó que “bajo ningún punto de vista” abandonará su precandidatura presidencial tras haber sido reincorporado al Poder Ejecutivo, y reveló que la Presidenta no le pidió que renunciara a sus aspiraciones de participar de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias del año próximo.

No obstante, ayer a la mañana insistió con que su nombramiento “no tiene nada que ver” con esa postulación sino con su experiencia en el Poder Ejecutivo, para el que ocupó cargos como jefe de Gabinete o ministro del Interior, entre otros. “Yo utilicé una metáfora: si (la Presidenta) está buscando un wing izquierdo habilidoso, no lo puede traer después para que juegue de marcador de punta por derecha, porque no va a sentir el puesto. Yo vendría a ser el wing izquierdo habilidoso”, señaló.

Por otra parte, celebró que el kirchnerismo tenga, además de él mismo, varios precandidatos presidenciales, como los gobernadores de Buenos Aires, Daniel Scioli, y de Entre Ríos, Sergio Urribarri, o el ministro del Interior, Florencio Randazzo.