Un legislador kirchnerista bonaerense también salió a diferenciarse de Boudou

El diputado provincial kirchnerista Fernando “Chino” Navarro aseguró ayer que, si estuviera en el lugar del vicepresidente Amado Boudou, “pediría licencia” porque esa actitud “liberaría” políticamente a la presidenta Cristina Kirchner y a los demás dirigentes oficialistas. “Yo pediría licencia”, ya que “me parece lo más razonable, porque tengo que abocarme a una causa que no es fácil y descomprimiría la cuestión política, liberaría a la Presidenta y a los compañeros del Frente para la Victoria”, respondió Navarro, cuando, en diálogo radial, se le preguntó qué actitud adoptaría si estuviera como el Vicepresidente procesado por la causa Ciccone.

“YO LE CREO”

“Yo le creo” a Boudou, reiteró, además, el diputado provincial, dirigente del Movimiento Evita, aunque admitió que “no es cómodo, nunca es cómodo que nadie cercano esté procesado o sospechado” a la vez que destacó que un eventual pedido de licencia “es una decisión personal” del titular del Senado. De todas formas, insistió en que Boudou está padeciendo una “campaña previa para desprestigiarlo, para acusarlo y luego condenarlo” por parte de la prensa opositora.

Consideró también que “la justicia tiene que actuar hasta las últimas consecuencias” evitando que “haya interferencias para que, cualquiera sea el resultado, no pueda ser discutido”.

Mientras desde el kirchnerismo se suman voces en favor de un alejamiento de su cargo, Boudou distendido, de muy buen humor y sin novia a la vista volvió a su fervor rocanrolero y presenció el viernes el show que La Mancha de Rolando brindó en La Trastienda. La presencia de Boudou fue también pocas horas antes de asumir la presidencia por el viaje de Cristina a la cumbre del Mercosur en Caracas.