Ciclistas platenses en una nueva travesía para cruzar Los Andes

Un grupo de platenses se prepara para realizar el vigésimo segundo cruce de Los Andes en sus bicicletas. Se trata de los miembros de La Loma Cicloturismo quienes, según adelantaron, viajarán sin vehículo de apoyo y harán un promedio de 50 KM diarios.

En la página de Facebook tienen cerca de 1700 adherentes que, en algún momento u otro, participan con sus bicicletas de las salidas grupales para recorrer caminos rurales y distintos poblados que les permiten estar en contacto con la naturaleza.

“En cada salida somos de 50 a 120 ciclistas de todas las edades; no siempre son los mismos porque por cuestiones personales no pueden participar de todas las propuestas, además vienen ciclistas de Buenos Aires, Quilmes, Lanús, Berisso y Ensenada”, señala Luis Vázquez, quien desde hace 13 años, cuando se formó el grupo, coordina las actividades.

Al principio fueron salidas por los alrededores de La Plata, siempre sin vehículo de apoyo y sin costo algunos para quienes participan, luego fueron sumando pueblos de la provincia. La experiencia les permitió con el tiempo recorrer gran parte del norte y sur de la Argentina e incluso, países limítrofes, vivencias que quedaron en una especie de diario de viaje digital del grupo.

En el próximo mes el grupo realizará un nuevo cruce de Los Andes; la travesía tendrá la particularidad de ser el cruce número 22. “Es un premio a lo que hacemos durante todo el año, en esta oportunidad somos 29 ciclistas que cruzaremos desde Malargüe, Mendoza, a Curicó, Chile, son 520 KM; está previsto salir el 10 de enero y volver el 23”, resume el ciclista.

EL PLAN

El plan contempla dormir en campamentos, después de desayunar, pedalear desde las 10 hasta la hora de almorzar y luego hasta las 18. Siempre se desplazan en grupo, pero entre los de adelante y los últimos llega a producirse una diferencia de una hora o mas.

Para los deportistas es fundamental estar bien hidratados, calculan que diariamente cada uno consume aproximadamente 5 litros de agua porque ese es el requerimiento para recorrer caminos que están a 2500 metros de altura donde las temperaturas son extremas.

“En oportunidades pasamos por situaciones extremas y nos tenemos que ayudar unos a otros, el año pasado por ejemplo hubo un chico del grupo que levantó mucha fiebre y tuvimos que superar el contratiempo de la mejor manera”.

Para muchos el ciclismo es un desafío para superar limitaciones. Ese es el caso de Alejandro Alba que con la meta de participar del cruce de los Andes del año pasado, perdió 70 kilos. “Yo no iba caminando ni a comprar el diario y ahora voy a realizar el segundo cruce”, cuenta con satisfacción.

El grupo La Loma asegura que La Plata tendría que ser encuadrada dentro de las ciudades de cicloturismo porque recibe una gran afluencia de esos deportistas.