River rescató un empate sin goles en la altura de Bogotá

En los 2.640 metros de altura de Bogotá, Colombia, River Plate rescató un empate (0-0) ante el local Independiente Santa Fe, en el partido de ida por la Recopa Sudamericana.

El partido, de muy pobre nivel técnico, se disputó en el estadio El Campín.

La llave quedó abierta y la revancha se disputará el próximo jueves 25 en el Estadio Monumental, a las 21.15. En cuanto al sistema de definición no tiene valor el tanto de visitante y ante paridad en puntos y diferencia de goles el segundo partido tendrá un alargue de 30 minutos. De persistir la igualdad habrá tiros desde el punto del tiro penal.

River Plate fue el que propuso más de entrada y pasó a jugar en campo ‘cardenal’, con Andrés D’Alessandro como eje del juego y Gonzalo Martínez y Sebastián Driussi como principales socios en la creación, mientras que el local trató de desplegarse en ataque, apoyándose en el manejo de Pérez y la sociedad por derecha entre Roa y Arboleda, que de a poco fue ganando espacio.

Pero cuando el partido no se inclinaba por ninguno de los dos, a los 17’, Driussi sacó un potente remate desde afuera del área, que el arquero Zapata tuvo que estirarse para enviarla al tiro de esquina. Y poco después el mismo disparo lo ensayó el Pity Martínez y Zapata respondió de la misma manera.

Tras esas jugadas, River comenzó a mostrar autoridad en el medio del campo para recuperar rápido y tener el control de la pelota en el campo rival. Juntando los volantes y desplegando los laterales, terminaba las jugadas cerca del área rival con mucha gente lanzada en ataque.

Cerca de la media hora, Santa Fe tuvo el gol. El arquero Batalla falló al intentar rechazar un balón aéreo que llegó desde la derecha y le quedó a Dairon Mosquera, quien remató pero Ponzio la sacó sobre la raya del arco.

En el complemento el juego fue diferente a la primera parte. El juego fue chato y el trámite muy equilibrado. River se replegó un tanto pero, como el rival no lo complicó en la primera media hora, trabajó el partido con cierta tranquilidad.

No existieron llegadas claras y, en la medida en que se fueron eclipsando Pérez (el técnico argentino Gustavo Costa lo reemplazó por Falcón), en Independiente, y D’Alessandro (fue relevado por Mora), en River, el partido se destiñó mucho más. Así fueron transcurrieron los minutos de un mal partido en El Campín. Un tiro libre de Salaberry, que se fue cerca del palo izquierdo de Batalla, y las variantes que ensayaron los entrenadores, más una momentánea salida del campo de Mora para acomodarse una venda, fue lo más relevante pasada la media hora de juego. No existieron acciones asociadas, el juego fue cortado permanentemente por las infracciones y esto no hizo más que aburrir a todo el mundo. En los últimos minutos Santa Fe decayó en su rendimiento y no encuentra la manera de llegar al arco visitante. Así, River terminó haciendo un buen negocio.

“Es un resultado positivo para nosotros. El plan de juego que intentamos salió en los primeros 25’, luego dividimos la pelota, sentimos el ahogo. Es un resultado favorable y en nuestra cancha va a ser distinto. Era importante no perder acá”, tiro ayer a modo de síntesis el DT Marcelo Gallardo.