Altos y bajos

↑ Lo peor ya pasó. Da la sensación que en el Pincha la tormenta más grande quedó superada, y de ahora en más será cuestión de retomar el camino. La goleada en Temperley pareció anticiparlo.

↑ Tiene variantes. Más allá de las transferencias, que le restaron potencial, el recambio igual dejó a los albirrojos con material suficiente como para desarrollar un torneo con protagonismo.

↑ Está en carrera. Si con todo lo malo que pasó en el comienzo de esta temporada está a cuatro puntos de los escoltas River y Unión, claro que puede soñar con ser una amenaza de Boca.

↓ Mucho ruido. No es bueno, para nada, que un plantel se desarrolle en medio de un cuadro de situación tan conflictivo como lo hizo hasta aquí el estudiantil. Deberá parar la pelota.

↓ Puntos flojos. Al margen del triunfo conseguido ante Temperley, mostró debilidades en todas las líneas, que llegaron a sorprender, y mucho, en defensa, donde no otorgó todas las garantías.

↓ Interrogantes. Han pasado cinco fechas de la Superliga, y viendo los cambios que incluyó Bernardi, el equipo titular aún está por verse. Deberá armarse rápido, sino va a ser más difícil.