Desde la cima mundial hacia los clubes de barrio

Conceptos y experiencias. Eso se llevaron los dirigentes que asistieron a la 1º Jornada Provincial de Gestión de Entidades Deportivas llevada a cabo en La Plata en el marco de la Semana del Básquet. La presencia de Horacio Muratore, Presidente de FIBA, Federico Susbielles, máxima autoridad de la CABB, y Leonardo Gutiérrez, integrante de la Generación Dorada, aportó un conocimiento de primer nivel.

El Colegio de Abogados de la ciudad de las diagonales fue el lugar donde coincidieron autoridades de elite mundial, nacional y local. Esos que se ocupan de la realidad del básquet internacional junto a los que hacen de la institución barrial su día a día.

“Mi padre fue el principal motivo para que yo sea dirigente. Él daba todo por el club y yo mamé eso”, inició Muratore, quien eligió ser uno más en la sala pese a su notable currículum. El tucumano es el máximo referente de la disciplina en el mundo y contó que llegó a esa posición “por el amor y la pasión hacia el deporte”. Antes de incursionar en FIBA fue Presidente de la CABB, y se tomó un momento para recordar aquellos años marcando como pata fundamental de su gestión el haber “unido a los dirigentes”.

Muratore transmitió además la política de género que desarrolla la FIBA, en relación al espacio que desde el organismo rector del básquet internacional le quieren dar a la mujer: “Hemos aumentado la cantidad de árbitros y entrenadoras mujeres. Es un camino arduo pero lo estamos transitando de a poco. Queremos tener más Presidentes mujeres en las Federaciones. Es una lucha larga”.

Quien tomó la posta ante cientos de ojos y oídos despiertos, donde nada interrumpía la palabra de los integrantes de la mesa redonda, fue Federico Susbielles, quien asumió como interventor de la CABB en un momento de crisis extrema. “La situación era muy grave y entendí que no podía mirar para otro lado. Fueron dos años como interventor muy duros. En tiempos de crisis tenes que apagar el fuego y yo traté de evitar la quiebra porque había un prestigio que defender”, recordó de aquella dura realidad.

Para salir de ese pozo, contó a los atentos dirigentes presentes que debió “profesionalizar la estructura de la CABB y generar fuentes de financiamiento”. Más allá de que la llama de la urgencia se extinguió y el sol volvió a asomar, el también Senador Provincial, al que le queda un año y medio de gestión, insistió en que todavía hay cuestiones por hacer. “Es importante mantener canales de comunicación y transparencia. El relacionamiento con el Estado es crucial pero preservando la independencia de la institución”, afirmó.

Por último tomó la palabra Leo Gutiérrez, uno de los tipos más queridos en la historia del básquet argentino, quien se colgó la medalla de oro en Atenas 2004 y levantó el título de Liga Nacional más veces que cualquier otro mortal. “Siempre fue muy buena la relación que tuve con los dirigentes. De a poco me fui arrimando a esa pata y cuando fui adquiriendo más protagonismo en los equipos tuve más vínculo”, manifestó el entrenador de Peñarol de Mar del Plata.

Con respecto a los directivos de las instituciones, expresó que las cualidades que deben sembrar son “la transparencia, sinceridad e ir al frente”. Además, delimitó el espacio de cada uno de los actores de un club: “La cancha y el vestuario son del jugador y entrenador. La oficina y los recursos son del dirigente”.

Leo trajo a discusión una problemática que hoy atraviesa a la Liga Nacional y que tiene “desangrando” a las entidades. “Hay que buscar la manera para que los clubes no tengan tantas pérdidas. Como está ahora la competencia, van a desaparecer varios”.

Así pasó una jornada de enriquecimiento para los dirigentes locales, esos que muchas veces deben transformarse en malabaristas a la hora de gestionar. Conocieron algunas recetas de los directores de orquesta.