Con el aval de la Justicia, se decidió poner a dormir para siempre a Pelusa

Según se conoció este lunes por la noche, luego de tres días de permanecer echada en un sector del zoológico platense, el equipo encargado del cuidado de Pelusa decidió administrar un tratamiento para que la elefanta duerma para siempre. La determinación fue tomada ante el irreversible cuadro que presentaba ya que en las últimas horas su salud empeoró y comenzaba a sufrir algunos dolores y molestias. 

El proceso constaba de dos etapas. En la primera se iba a inyectar un sedante y en la segunda se procedería ala aplicación de una droga. En base a los detalles que dieron a conocer los especialistas sobre la intervención que se concretó cerca de las 22.45 de este lunes, sólo bastó realizar la primera parte del tratamiento ya que Pelusa falleció antes de que se administrara la droga. 

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La sustancia que se iba a inyectar a Pelusa iba a ir ralentizando de forma paulatina el ritmo cardíaco hasta el cese final del funcionamiento del órgano. En este marco, lo que se buscaba era que el animal no sea sometido a sufrimientos.

La decisión de ponerle fin a la vida de Pelusa recibió el aval de funcionario de la justicia platense que, tras conocer la recomendación realizada tanto por los cuidadores y veterinarios que permanecían a su lado en el zoológico platense como por aquellos que estaban monitoreando su salud desde el santuario de Brasil, se hicieron presentes en el lugar a fin de interiorizarse sobre el estado de situación de la elefanta.

"El equipo veterinario del Jardín Zoológico y los especialistas del Santuario de Elefantes de Brasil junto a la Fundación Franz Weber, definieron tomar el único camino posible para que ella no sufra", consignaron en un comunicado enviado desde el Municipio.

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Aclararon que la decisión se tomó junto al fiscal del Ministerio Público de la provincia de Buenos Aires, Marcelo Romero; el titular del Juzgado de Garantías 4 de La Plata, Juan Pablo Masi; la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, a cargo de Guido Lorenzino; la Defensora Ciudadana de La Plata, Florencia Barcia; y el Decano de la Facultad de Veterinaria de la Universidad de La Plata, Marcelo Pecoraro, quienes siguieron de cerca la situación de Pelusa y acompañaron la solicitud de eutanasia planteada por los especialistas.