El peor final: los rescatistas hallaron sin vida a Julen

La operación de rescate del niño Julen finalizó anoche con la peor noticia. Luego de doce días de intensos trabajos para llegar hasta el niño de dos años, anoche fue hallado su cuerpo sin vida.

El delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez de Celis, confirmó la información. “Desgraciadamente a la 1.25 horas de esta madrugada (las 21,25 en la Argentina), los equipos de rescate han accedido al punto del pozo donde se buscaba a Julen y han localizado el cuerpo sin vida del pequeño. Se ha activado la comisión judicial. Mis condolencias y pésame a la familia”, manifestó a través de la red social Twitter.

De esta forma, el episodio que tuvo en vilo a gran parte del país y del mundo, terminó con el resultado menos deseado.

Desde muy temprano ayer se había especulado con la posibilidad de llegar en la jornada al lugar donde había caído el niño de dos años de edad en un pozo en Málaga, en España.

Tras haber excavado más de la mitad de la galería horizontal con la que se intentó llegar al menor que estaba atrapado a más de 70 metros de profundidad, a última hora de ayer, cuando estaban a 65 centímetros de alcanzar el objetivo, una roca dura impidió el progreso y tuvieron que utilizar explosivos para avanzar.

“Después de 15 horas de trabajos, los mineros avanzaron casi dos metros de los 3,8 necesarios para llegar hasta l lugar donde se encontraba el niño”, dijo Francisco Delgado Bonilla, delegado del consorcio de bomberos de Málaga, que participa del operativo de rescate.

La nueva veta de cuarcita, de roca dura, hizo que se necesite de nuevo la intervención del grupo de explosivos TEDAX de la Guardia Civil para una cuarta micro voladura. Luego los mineros reingresaron al pozo y avanzaron un poco más en su búsqueda.

En la zona en la que se desarrolló el dispositivo de rescate del nene hubo un contínuo ir y venir de helicópteros, uno de los cuales regresó después de volar hasta Sevilla para llevar hasta el lugar material explosivo con la intención de que los equipos de rescate no se queden en ningún momento sin provisión del material para las microvoladuras controladas que ayuden a desmoronar la roca.

“Una vez más, la dureza del terreno demoró las excavaciones y obligó a los expertos mineros a realizar dos micro voladuras”, indicó el experto. Con el correr de las horas se tuvieron que llevar a cabo otras dos micro voladuras y ya son cuatro en total.

Bonilla insistió en la dificultad del operativo a cargo de la Brigada de Salvamento Minero, que trabaja a 72 metros de profundidad y con la hipótesis de que el nene se encontraba cerca obligó a extremar las medidas de seguridad.

El operativo, como se dijo, entró a última hora de ayer en la fase final con el descenso de los rescatistas, luego de doce días de intensos trabajos de ingeniería para perforar un túnel vertical al pozo de 70 metros de profundidad en el que cayó el 13 de enero.

Ahora, según se informó, las pericias deberán determinar el momento en que se produjo el deceso.