En UNO tiraron bombas de humo pero también de estruendo: "Podría haber sido una catástrofe"

Tras el ataque que sufrió el Estudiantes el pasado fin de semana, cuando un grupo de personas arrojó pirotecnia desde el exterior para detonarlas a la hora del partido entre el Pincha y Atlético Tucumán, el dirigente ligado a la Seguridad del Club, Francisco Fábrega, admitió que "podría haber sido una catástrofe".

El directivo sostuvo que además de bombas de humo había artefactos explosivos como bombas de estruendo, que afortunadamente no se activaron.

"Por calle 115 y 57 se bajaron tres personas con bultos que son arrojados al interior del estadio, que contenían no sólo bombas de humo sino también bombas de estruendo. Podría haber sido una tragedia, porque hay un equipo eléctrico en esa zona", reconoció en La Redonda.

En tanto, contó que lo que se detonó "fueron un par de bombas de humo, con una sola bomba de estruendo. Las demás afortunadamente no llegaron a detonarse".

Sobre la inspección, aseguró que "se hizo una revisión que hizo bomberos y nadie lo observó. Fue un milagro que no se hayan activado porque estaríamos hablando de una catástrofe".

Cabe señalar que tal como informó hoy este medio, la figura de la denuncia es "Atentado contra la seguridad pública" ya que desde el Club entienden que "lo hicieron con una intención de atentar contra instalaciones del club, con 30 mil personas en la cancha. Es difícil de explicar".