“Manada”: el fiscal salió a explicar por qué usó la frase “desahogo sexual”

Fernando Rivarola, de Rawson, reconoció que esa alusión “debe erradicarse”, pero justificó haber bajado la calificación del delito

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Tras el escándalo que causó una frase que usó en su dictamen por la violación en manada en Playa Unión, el fiscal jefe de la ciudad chubutense de Rawson, Fernando

Rivarola, dio sus explicaciones en una carta pública en la que reconoció que la alusión “desahogo sexual”, a pesar “de su amplio y arraigado uso judicial, debe ser erradicada”.

Por su resolutorio, los tres hombres acusados no tendrán pena de prisión efectiva, ya que disminuyó la calificación de “abuso con acceso carnal” a “abuso sexual simple”.

“Soy consciente, hoy más que nunca, de la importancia que tienen las palabras como instrumentos de cambio en la deconstrucción de estereotipos machistas “, argumentó en un escrito publicado en la web del Ministerio Público Fiscal de la Provincia de Chubut.

“Escribo estas líneas luego de una profunda reflexión generada a partir del impacto social y mediático producido por un acuerdo de juicio abreviado (art. 355 CPP), presentado en el marco de un proceso por abuso sexual”, explicó, destacando que dicho acuerdo tuvo como objetivo “lograr la condena de los acusados y que fuera tomada con expresa y libre conformidad de la joven damnificada el caso, quien tuvo participación activa durante toda la investigación”.

Rivarola insistió en su escrito que en el cambio de acusación se tomó en cuenta a la víctima y que fue en su beneficio, así como criticó que se haya publicado parte de su dictamen por considerar que se “sacaron de contexto”.

“Al haber trascendido parcialmente el contenido del mencionado escrito judicial -cuya publicidad está legalmente restringida por tratarse de un delito contra la integridad sexual de una persona menor de edad y que involucra a dos menores como imputados- se ha generado una importante tergiversación de los hechos, cuya inmediata repercusión masiva ha impactado negativamente en la víctima, revictimizándola e invadiendo nuevamente su intimidad”. Por otra parte, Rivarola se justifica al afirmar que fue él quien decidió abrir la investigación de la violación en manada “a partir del breve relato de los hechos efectuado por la víctima en redes sociales”.

Hizo hincapié también en que se trató de “un delito de abuso sexual - no violación- que depende de la instancia privada” y que en todo momento su actuación y la del Servicio de Atención a la Víctima, “fue para escuchar y contener y defender los intereses de la joven”.

Como se viene informando, el hecho ocurrió en septiembre de 2012, en una fiesta que jóvenes de familias influyentes de Chubut organizaron en una casa frente al mar, en Playa Unión. Allí concurrió la denunciante, entonces de 16 años, con otras siete chicas. Según publicó ella en 2019, a través de la red social Facebook, sus amigas descubrieron que varios jóvenes estaban abusando de ella en una habitación, mientras estaba inconsciente. No radicó formalmente la denuncia, pero la fiscalía inició una investigación de oficio.

La víctima y su familia se radicaron en La Plata, donde ella, que tiene ahora 25 años, estudia una carrera universitaria.

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